Ha sido, sin duda, la noticia más controvertida que ha generado el famoso 'bono cultural' con el que el Gobierno ‘premiará’ a los jóvenes que cumplan 18 años. La tauromaquia no será uno de los sectores a los que aquellos que estrenarán la mayoría de edad podrán destinar sus 400 euros. Así lo transmitió el Ejecutivo central tras los vaivenes suscitados entre la coalición encargada de regir las riendas del país. Las reacciones en el sector taurino no se han hecho esperar y éste ha puesto el grito en el cielo ante tal decisión.
Una de las voces más autorizadas en este sentido dentro de la Cuenca taurina es la del empresario de la plaza de toros, Maximino Pérez, que como sus homólogos no encuentra justificación alguna ante esta “injusticia”. “A decir tonterías no les va a ganar nadie”, considera, y es que “ahora no les vamos a quitar la careta porque ya sabemos cómo son”. El encargado de pilotar los mandos del coso conquense considera que es una decisión “absurda” y “un brindis al sol por cuestiones políticas”, pues “los partidarios más acérrimos del PSOE o los que tienen el carné más antiguo creo que sienten vergüenza cuando ven cosas así”.
De hecho, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha mostrado partidario de incluir los toros en el marco de las actividades culturales recogidas en el bono, entre las que también están, por ejemplo, los libros, la música, la danza, el teatro, el cine y hasta los videojuegos. “El Gobierno de la nación no es el PSOE o, al menos, el PSOE que ha conocido la mayoría de los españoles; es, ni más ni menos, Sánchez y sus cuatro amigos de Podemos y los radicales”, subraya el empresario taurino.
Más allá de la ingente cantidad de puestos de trabajo que genera, la Fiesta de los toros aporta más de 120 millones de euros al año a las arcas del Estado solo en concepto de IVA. Una generación de riqueza y empleo que en Cuenca es fácilmente comprobable cada final de agosto gracias a la Feria de San Julián, uno de los espectáculos de masas más importantes de la ciudad.
Pérez no solo se apoya en eso para defender su postura sino en algo “tan básico”, dice, como la propia ley, y es que la tauromaquia está circunscrita a la Cultura de este país dentro de la normativa. Pero no le extraña esta posición porque son “campeones olímpicos en saltarse las leyes” y por eso, si hay que llevarlos ante los tribunales, tal y como ha señalado que hará la Fundación del Toro de Lidia, “adelante”.
El empresario espera que las “malas decisiones de Sánchez, y no solo en esta materia que es secundaria al lado de cosas muchísimo más importantes, no nos aboque a la destrucción de más empleo y que repercuta en la economía de todos los españoles, que es lo más triste”.