Decenas de miles de ciudadanos de Hong Kong formaron hoy una cadena humana que abarca varios distritos del centro financiero asiático en una nueva acción prodemocrática, en recuerdo a la cadena formada hace justo 30 años en las repúblicas bálticas en pro de la independencia de la URSS.
Un gran número de ciudadanos se reunieron en las calles cerca de estaciones de metro en tres líneas en la isla de Hong Kong, en Kowloon, y en los Nuevos Territorios para tomarse de las manos y crear el "Camino de Hong Kong".
Esta fue una acción pacífica organizada por los internautas a través de LIHKG, un foro utilizado por los manifestantes para organizar este movimiento antigubernamental que ya cumple casi tres meses y que está suponiendo la mayor crisis política en décadas para la urbe.
Hong Kong pide emanciparse de China con una cadena humana - Foto: KAI PFAFFENBACHLa protesta de hoy fue un guiño al Camino Báltico o la Cadena Báltica, que tuvo lugar el 23 de agosto de 1989, mediante la cual dos millones de personas de Estonia, Letonia y Lituania se unieron y formaron una larga fila en protesta por la ocupación soviética en la misma fecha hace 30 años.
Las multitudinarias protestas en Hong Kong, que se han sucedido desde principios de junio, mostraban en un principio su rechazo a un proyecto de ley de extradición presentado por las autoridades locales que permitiría la entrega de sospechosos a jurisdicciones sin acuerdos previos como la China continental, algo que los opositores al texto consideran como el fin de las garantías judiciales que ofrece el sistema hongkonés.
Sin embargo, las protestas han ido evolucionando en las últimas semanas hacia demandas más amplias sobre los mecanismos democráticos de la ciudad y hacia el rechazo a la creciente influencia de Pekín en los asuntos locales.
Hong Kong pide emanciparse de China con una cadena humana - Foto: KAI PFAFFENBACHBajo el modelo "Un país, dos sistemas", el Gobierno chino se comprometió a salvaguardar la autonomía de Hong Kong y a respetar una serie de libertades de las que no gozan los ciudadanos de la China continental hasta 2047, tras recuperar la soberanía del territorio de manos británicas.
Las consecuencias para Huawei
El gigante tecnológico chino Huawei Technologies calcula que las medidas de presión de Estados Unidos contra la compañía pueden llegar a reducir "en más de 10.000 millones de dólares" (9.040 millones de euros) los ingresos de su negocio de smartphones, una cifra que supone la tercera parte del impacto previsto inicialmente por Huawei, que no espera que EEUU vaya a cambiar de postura sobre la compañía.
"Podría ocurrir que el negocio se viera afectado en 10.000 millones de dólares menos, solo en smartphones", ha señalado en rueda de prensa Eric Xu, presidente rotatorio de Huawei, durante la presentación del procesador de Inteligencia Artificial (IA) Ascend 910 y su plataforma de computación MindSpore.
"Nuestra posición actual es mucho mejor de lo que fue pronosticado", ha añadido el ejecutivo chino, quien ha expresado su confianza en que el impacto negativo sea finalmente inferior.
El pasado mes de junio, en una primera estimación del impacto que las restricciones de EEUU podrían suponer para Huawei, el fundador de la empresa, Ren Zhengfei, habló de un efecto negativo de unos 30.000 millones de dólares (27.097 millones de euros).
El Departamento de Comercio de EEUU decidió extender el pasado lunes por otros 90 días la licencia temporal sobre el veto que impide a Huawei y varias de sus filiales mantener relaciones comerciales con empresas estadounidenses por motivos de seguridad, después de que estas fueran incluidas el pasado mes de mayo en la "lista de entidades".