La relajación de las restricciones de movilidad en la región posibilitará el regreso de los familiares a las residencias de ancianos. La patronal que agrupa a estos centros en la comunidad autónoma ha celebrado la decisión anunciada por el Gobierno regional en la mañana del sábado. «Todas las medidas que favorezcan el estado emocional de los mayores son buenas», asegura José Manuel Llario, presidente de la Asociación de Castilla La Mancha de Residencias y Servicios de Atención a los Mayores (Acescam). La noticia ha sido bien acogida en los geriátricos, donde se congratulan por la vuelta de los allegados. «Nos da tranquilidad el saber que los mayores van a estar en contacto con sus familiares».

Tanto los residentes como el personal de las residencias han completado la vacuna frente a la Covid-19. Todos deberían estar inmunizados, una circunstancia que aleja el riesgo de contagios. «Ellos se van a beneficiar», insiste Llario sobre las consecuencias de la implantación del nivel 2 para quienes viven en los centros sociosanitarios.

Más allá del anuncio realizado por el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, sobre la reapertura y algunas consideraciones sobre el protocolo a seguir, desde Acescam esperan a conocer el contenido del decreto para saber a qué atenerse una vez empiecen a recibir las primeras visitas. «Ya nos están llamando los familiares porque quieren ser los primeros». La Junta ha explicado esta mañana que cada visita se realizará por una única persona, que solo podrá estar durante una hora y que no podrán excederse las dos reuniones por semana. Además, el Gobierno regional ha asegurado que un test de antígenos verificará que el familiar que accede a la residencia no está contagiado. El gremio regional de residencias aguarda a la publicación de la normativa para conocer los detalles concretos que regirán para las entradas de personal ajeno.

Asimismo, Llario plantea la posibilidad de que las salidas de los residentes al espacio público «se puedan hacer con normalidad». La posibilidad de que aquellos residentes que están bien y gozan de autonomía «puedan salir del centro» emerge como una demanda aún sin respuesta. «Les estamos privando de libertad».

«La de hoy es una medida más de las que hay que ir tomando», concluye el rector de Acescam. El colectivo que dirige festeja un primer paso de vuelta hacia la normalidad.