Desde que el alcalde de Cuenca, Darío Dolz, anunciará la remodelación del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Cuenca –el pasado 1 de julio–, el edil Mario Fernández ha tenido que ocuparse en tiempo récord de unas fiestas que pasarán a la historia por celebrarse en medio de una pandemia. El también responsable  de la Concejalía de Juventud asumió una de las áreas que mayor trabajo conlleva y lo hizo a escasos días de que empezará la programación. De hecho, reconoce Fernández que «éste es uno de los momentos del año con mayor actividad, porque se juntan unas fechas tan señaladas como San Julián, San Mateo y a 80 días de las Navidades, fiestas muy señaladas para los niños», pero afirma que la labor de su antecesor, el concejal Adrián Martínez, le  ha allanado el terreno para que no se le escape nada desde que tomó las riendas.  «La agenda está bastante complicada», asegura el edil, quien dice tener «ilusión de escuchar a todo el mundo y hacer lo máximo que se puede para que los conquenses disfruten». A una semana escasa para que finalicen los festejos, Fernández valora cómo se han desarrollado los primeros días.  

¿Ha tenido que hacer un máster acelerado para coger las riendas de la concejalía de festejos o ya estaba todo atado cuando le comunicaron que se haría cargo del área?

Sí, Adrián Martínez tenía bastante tarea adelantada y, en conjunto, hemos trabajado en equipo para poder organizar y desarrollar estas fiestas de la mejor forma y lo más seguras posibles.

Sin duda, el Ayuntamiento ha sido valiente a la hora de organizar unas fiestas marcadas por el control de los aforos y las restricciones de la pandemia. ¿Qué está siendo hasta ahora lo más difícil de la organización?

Es un trabajo continuo. Empezamos con unas medidas de seguridad y, en el día a día, hemos tenido que ir mejorando o retocando algunos detalles. Por ejemplo, en este fin de semana, que ha sido de mucha aglomeración, creemos haber realizado un trabajo acorde con la seguridad que se necesita.

¿Hay algún suceso, hasta la fecha, que haya trastocado los planes iniciales de la Concejalía y les haya obligado a tomar otras decisiones acordes con el momento?

No, la verdad es que comenzamos con unas medidas de seguridad que hemos ampliado, sabiendo que este fin de semana iba a ser de mayor afluencia y lleno de actividades, caso de los conciertos de Perales, actividades deportivas como el Triatlón y la feria taurina que reúne a unas 4.000 personas. Como digo, sabíamos que este fin de semana había que reforzar las medidas. Gracias a Dios no ha habido ningún incidente. 

¿Cómo valora el comportamiento de los conquenses? ¿Se puede decir que entienden y asumen la normativa que hay que cumplir?

Creemos que los conquenses han tenido un comportamiento bastante responsabilizado, tanto en los conciertos como en el recinto ferial y, además, los servicios municipales y la seguridad privada han realizado una labor de información continua para que no tengamos ni incidencias ni irresponsabilidades por parte de los ciudadanos. 

En cuanto a los conciertos que se han celebrado hasta la fecha y a las entradas que se han vendido, ¿colman las expectativas iniciales que se tenían?

En estos momentos, opino que han sido todo un éxito. Sin ir más lejos, el último que tuvimos de José Luis Perales se nos quedará grabado para la ciudad de Cuenca. Fue un lleno absoluto y la gente disfrutó desde que entraba por la puerta de La Fuensanta. En definitiva, los conquenses y visitantes disfrutaron de una gran actividad programada para la Feria y Fiestas de San Julián. 

Precisamente, hay quien ya advierte que los conciertos celebrados en el estadio municipal han podido dañar un tanto el césped. ¿Hay un plan para su recuperación si fuese necesario?

Desde mi Concejalía puedo decir que es una instalación municipal y, como tal, creemos que durante todos los conciertos la gente ha disfrutado en un recinto que no conocía. Sobre el tema de la reparación para los partidos de fútbol, está claro que lo antes posible se va a recuperar y compromiso existe para ello. Desde el Ayuntamiento, queremos darle uso a La Fuensanta tanto para actividades culturales como deportivas.

En los próximos días se concentrarán las actividades, caso del concurso hípico. ¿Cómo se ha organizado la afluencia de público a uno de los eventos que más concurrencia registra?

Eso lo realiza el club organizador, que presentó su plan de seguridad y, una vez aprobado, tienen que considerar todas las medidas necesarias. Esperamos que se respete el aforo, que está delimitado por la Junta de Comunidades al 75 por ciento, cómo estamos haciendo nosotros en el recinto ferial. En ese sentido, confiamos en que no se produzca ningún incidente. 

En estos días festivos se han colocado puntos violeta que garantizan la seguridad en situaciones de violencia de género. ¿Se han registrado consultas y los miembros de Cruz Roja han tenido que atender alguna agresión?

Si no tenemos cifras concretas es una muy buena señal. Lo que sí manejamos son datos de gente que ha recibido información. Por ejemplo, durante los conciertos se habían interesado por el punto violeta 150 personas y en el recinto ferial no tengo el número exacto ahora mismo, pero sé que los responsables han informado al público que se ha acercado.

Dicen los feriantes que, en líneas generales, están contentos con las instalaciones del recinto ferial. ¿Hay alguna mejora planteada para este espacio? ¿Se llegará a integrar el Bosque de Acero algún día en este área de ocio de la capital conquense?

Se está trabajando en tener un recinto ferial en perfectas condiciones. Nos quedamos con que los feriantes están muy a gusto. Sabemos la situación que están viviendo  y, por esta razón, no se les ha cobrado tasas. Intentamos ser flexibles  y, por ello, les hemos exonerado del cien por cien de la tasa de ocupación de la vía pública. Eso lo han agradecido muchísimo. Nos lo han trasladado en las reuniones periódicas que hemos mantenido, puesto que hemos seguido reuniéndonos por si había que hacer alguna mejora o teníamos que pulir algún detalle. La verdad es que están muy contentos. Sobre el Bosque de Acero puedo decir que también se está trabajando en otra línea, pero de momento no puedo avanzar nada. 

Imagino que en cuanto se acaben estas particulares fiestas habrá que ir pensando en la feria de 2022. Si las circunstancias lo permiten, ¿habría que organizar unos festejos que sean difíciles de olvidar?

Personalmente, por mi forma de ser, estamos aquí para trabajar, escuchar a los ciudadanos y darles lo que ellos quieren. Creemos que las fiestas del año que viene, si todo va bien, deben ser inolvidables. Lucharemos por ello e intentaremos hacer lo que la ciudadanía nos demande. 

¿Qué recomendaciones les da a los conquenses y qué les pide en estos próximos días de fiesta?

Que sigamos siendo responsables. Estamos ultimando la feria y fiestas de un año que también será difícil de olvidar. Como hemos podido comprobar, no hemos querido dejar de lado el punto amable y festivo que tiene esta ciudad. Espero que los conquenses actuemos con mucha responsabilidad en los que queda de feria y disfrutemos de ella lo máximo posible.

Una vez que finalicen estas fiestas habrá que ir pensando en San Mateo. Aunque ya se anunció que no se celebrará como es costumbre... ¿Ya se trabaja en un programa limitado que permita desarrollar alguna actividad? ¿Podría avanzarnos algún detalle que esté cerrado junto con la Asociación de Peñas Mateas?

No queremos olvidarnos de las fiestas populares de San Mateo, que para los conquenses son especiales y muy familiares. Estamos trabajando en un programa cultural, gastronómico e histórico. Queremos recordar la cultura y la historia de Cuenca y Alfonso VIII. De hecho, esta semana seguimos teniendo reuniones. Una vez que acaben las fiestas de San Julián empezaremos a informar a los conquenses.