El sindicato STE ha informado hoy de que  el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha ha dictado sentencia estimando su última demanda, declarando nula la resolución de ratios de alumnos por aula del curso 2019-20, considerando que las ratios allí fijadas eran ilegales al vulnerar la normativa de rango superior.

STE recordó que con Cospedal las ratios se elevaron a 30 alumnos en Infantil y Primaria, 36 alumnos en Secundaria, 40 alumnos en Bachillerato y 35 alumnos en Formación Profesional. El sindicato explica que después Page anunció en 2016 la bajada paulatina de las ratios para dejarlas en las cifras legales en un plazo de cuatro años.

Pero desde STE han denunciado esa «reducción paulatina» de las ratios, ya que apuntan que en 2016 ya no se daban las circunstancias que avalasen mantener las ratios al nivel excepcional planteado cuando los recortes. Aunque reconocen que sus demandas eran desestimadas año tras año, desde el sindicato nunca han dejado de creer que llevaban la razón y celebran que la última sentencia así se lo haya reconocido.

Explican que en dicha sentencia, a su vez, se reconoce que las resoluciones que fijaban la ratio en los años 2016 y siguientes, también eran contrarias a lo dispuesto en la normativa de rango superior, determinando que las sentencias anteriores dictadas por dicho Tribunal no fueron acertadas.

Educación señala que en estos momentos las ratios ya  cumplen «la legalidad»

La consejera de Educación, Rosa Ana Rodríguez, valoró la sentencia que anula, recordando que las tasas siguen descendiendo desde que llegó al PSOE al Ejecutivo autonómico en 2015.

Quiso recordar al sindicato que en la actualidad no habría presentado esta demanda, ya que en estos momentos ya se está cumpliendo «la legalidad».

Apuntó que cuando el PSOE retomó el Gobierno se encontró «unas ratios de Cospedal en umbrales muy altos». «En Infantil y Primaria había ratios de 30 alumnos, en Secundaria 35 y en Bachillerato más de 40», ha afirmado, recalcando que se han ido reduciendo «progresivamente» pese a «dificultades presupuestarias».