Numerosas personas asistieron el domingo por la tarde en pleno casco antiguo de Tarancón a la representación del belén viviente organizado desde hace cuatro años (con la excepción de la Navidad pasada por la pandemia) por la Parroquia de la Asunción. Más de 50 personas, entre actores, narradores y personal de atrezzo, participaron en el desarrollo de las distintas escenas, que por primera vez se llevaron a cabo con éxito en el paraje de El Caño, en vez de en el interior del templo parroquial como en las ediciones anteriores. Animales de verdad, nuevos decorados y escenas o fuegos artificiales fueron otras de las novedades de este belén viviente benéfico, con el que se han logrado recaudar casi mil euros para la construcción de los nuevos salones parroquiales. 

Desde la organización agradecen la asistencia del público y su colaboración, la labor de todos los parroquianos y en especial la participación de dos caballos, con sus amazonas, de la Escuela de Equitación Emilio Galán, la parte técnica que corrió a cargo de Acecom-Agusa, así como la implicación del Ayuntamiento. 

"Esperemos que pronto nos den esos permisos para poder construir los salones, a partir de ahora empezamos a trabajar para el año que viene", aseguran desde el grupo que ha estado al frente de una representación que va camino de consolidarse en el tiempo.

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