Los transportistas de Cuenca se unen al parón de diciembre

Jonatan López
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Las obligaciones de carga y descarga y la implantación de peajes en autovías ponen a los camioneros al límite

Los transportistas de Cuenca se unen al parón de diciembre - Foto: Reyes MartÁ­nez

Lo anunció este miércoles el Comité Nacional de Transporte por Carretera y, en solo 24 horas, ya ha tenido la respuesta favorable de todo el sector. Los transportistas del país cesarán su actividad del 20 al 22 de diciembre. No es una huelga, es un parón patronal obligado por varias circunstancias que ponen en riesgo la supervivencia de numerosas empresas dedicadas al transporte de mercancías por carretera.

Las principales razones para cesar la actividad son la obligación de los conductores de realizar cargas y descargas de las mercancías de los camiones y la posible implantación de la Euroviñeta, o el sistema de peaje que se quiere establecer en las autovías y que se aplicaría a vehículos pesados de más de 12 toneladas. 

Juan González, presidente de la Asociación Provincial de Transporte de Mercancías por Carretera de Cuenca (Acutrans), dice estar sorprendido por las paulatinas subidas de los costes del gasóleo, el Adblue, los neumáticos, los repuestos, o los seguros. «Prácticamente está subiendo todo un 85 o 90 por ciento», afirma, y subraya que solo los combustibles suponen «el 30 por ciento del coste de explotación de  los gastos de una empresa y el personal es otro 30. No hacemos más que pagar impuestos y solo en dos partidas se paga una cantidad ingente de dinero», a la que se suma el IVA, el impuesto de circulación o el municipal. En ese sentido, afirma que «el sector del transporte es la actividad más fiscalizada que existe. No hay otra actividad en la que se paguen más impuestos, directos e indirectos». 

El principio de esta situación insostenible tiene su origen antes y durante la pandemia. El Gobierno «nos pidió un esfuerzo por el momento en el que nos encontrábamos y el transporte dio el do de pecho para salir adelante». Sin embargo, «después han habido una serie de reivindicaciones de cara a la administración y no se han visto satisfechas».

Carga, descarga y peajes. González afirma estar de acuerdo con los sindicatos a la hora de prohibir el ejercicio de carga y descarga por parte del conductor, puesto que «reivindicamos que nuestro trabajo es el de conducir los camiones y no el de cargar o descargar. Primero por prevención de riesgos laborales, pues los conductores podrían tener un accidente por una labor que no debería ejercer; segundo porque no es un trabajo retribuido; y tercero porque esa tarea no repercute en los tiempos de conducción y descanso».

Además, dice no entender que «en un país con cuatro millones de parados es paradójico que no se obligue al cargador al trabajo de carga y descarga, cuando es una vía laboral para incrementar los puestos de trabajo y la contratación». 

Por otro lado, recuerda que hace unos años se hablaba de la implantación de la Euroviñeta y «ya es una realidad. Vamos a tener que pagar por circular en autovías y en carreteras nacionales». De hecho, comenta que ya hay países de la Unión Europea que lo aplican, pero «aquí se nos quiere hacer pagar por kilómetro por transitar en las autovías. Nos van a cobrar lo que les dé la gana y va a ser una ruina». El sector, por tanto, «ha dicho basta. No estamos dispuestos a pagar por circular por una autovía. La administración tendrá que sacar los recursos para  el mantenimiento de las carreteras de otro sitio». 

Por último, González cree que los transportistas se ha concentrado en las últimas fechas «por que hay muchas pequeñas y medianas empresas que están desapareciendo» y recuerda que otro de las razones que acucian al sector es la falta de conductores. En este punto, planteó ante la asociación nacional del transporte que la administración habilite la homologación de todos los países sudamericanos para que puedan venir a trabajar profesionales de aquellos países, o que se efectúe una formación profesional dual para que se incorporen nuevos conductores.