El debate de una Proposición No de Ley del Partido Popular sobre la caza presentada por el Partido Popular sirvió para que ‘populares’ y socialistas compitieran por ser la formación que más apuesta por el apoyo al sector cinegético. Por su parte, Podemos dejó claro que no se moverá de la actual Ley de Caza, aprobada por morados y socialistas.

La PNL fue rechazada por los votos del PSOE y Podemos en el último Pleno. Pero su exposición le sirvió a la diputada del PP Lola Merino para erigir a su partido en defensor del sector, donde se han extendido los críticos con la actual ley del sector. Entre otras cosas, denunció restricciones a la caza nocturna del jabalí o las trabas a la licencia interautonómica.

Esto fue rechazado por el consejero de Agricultura.Francisco Martínez Arroyo insistió en que introducir la licencia interautonómica supondría perder ingresos en la región a favor de cazadores foráneos. Defendió la política de la Junta, que está eliminando tasas a cazadores radicados en la región.

Algo en que coincidieron socialistas y ‘populares’ fue en criticar la postura alejada de Podemos hacia la práctica de la caza. Por un lado, la diputada socialista Torralba lamentó que Llorente no apreciara la aportación a la economía regional que supone la actividad cinegética y rechazó que el sector de la caza, por su extensión social, sea reducido por el diputado morado a un simple ‘lobby’ de presión.

Por su parte, la ‘popular’ Merino situó a Podemos y el movimiento ecologista como verdaderos inspiradores de la actual Ley de Caza. De ello, dedujo que los socialistas «han vendido la caza de Castilla-La Mancha a cambio de un sillón.