Días antes de que Cuenca pasase otra vez al nivel 3, el Teatro Auditorio daba a conocer, a través de la directora de la Fundación de Cultura Ciudad de Cuenca, Nelia Valverde, su programación para el primer trimestre de este año pero a empezar, no obstante, el próximo 5 febrero. Semanas después, pese a que la ciudad continúa inmersa en el nivel 3 y espacios como el Teatro Auditorio continúan cerrados al público, la esperanza de poder arrancar en ese día se mantiene y de hecho está abierta la venta de entradas al público para un aforo, por otra parte, por debajo del 30%. No obstante, como apunta Valverde, pese a esto y a la puesta de otras medidas de prevención y a los cambios que se han tenido que meter en la programación por el virus, en muchas de las funciones que se han podido hacer desde la declaración de la pandemia se ha puesto el cartel de que no quedan entradas.

Cuando el Teatro Auditorio anunció la programación de este primer trimestre la ciudad estaba de nuevo en nivel 3 y continúa en ello. ¿Cómo ve el tema la directora de la Fundación de Cultura Ciudad de Cuenca, Nelia Valverde?

Teniendo ya preparada la programación del primer trimestre llegó el anuncio de vuelta al nivel 3, y esto, nos hizo que, además, de retrasar su presentación, tuviésemos que reajustarnos porque inicialmente teníamos intención de abrir en enero. Vista la situación vimos que lo mejor era programar a partir de febrero, del día 5 y con la esperanza de que podamos abrir. Hoy por hoy tenemos que esperar a ver que pasa con la situación sanitaria, pero esto no quita para que la venta de las entradas siga abierta. Sí por cualquier caso hubiese prorroga del nivel 3, las entradas las devolveríamos o se podrían usar para nuevas fechas, en ningún caso, los espectadores van a sufrir ningún perjuicio. No obstante, lo que está claro es que si reabrimos las medidas de seguridad, de prevención o de ajuste a los protocolos sanitarios que tenemos desde octubre continuarán con un aforo reducido al menos del 30%.

No obstante, en el supuesto de que se prolongue la situación actual, ¿les tocaría de nuevo reprogramar sobre lo cerrado?

Al igual que hicimos la temporada pasada, nosotros no queremos perjudicar a las compañías y, además, debemos acatar las condiciones que nos imponen en su contratación. Pero, nosotros también tenemos el compromiso de reprogramar y buscar nuevas fechas para los espectáculos afectados y si es posible en esa misma temporada. Y cuando no fuese así pasarían a la siguiente. Nuestras temporadas son de tres meses.

¿Les resulta complicado traer los espectáculos en general, y en particular aquellos que sean los más destacados?

Detrás de cada programación hay un trabajo de mucho tiempo. Sin embargo, hoy por hoy, debido al Covid, los plazos con los que se trabaja son más cortos sea por el tema de la reprogramación o porque nos les queda mucha fecha libre. Es fácil tratar con las compañías incluso en este tiempo y eso es de agradecer.

¿Cómo le está afectando entonces la Covid a la cultura?

La Covid está afectando mucho a la cultura, empezando porque las contrataciones que se hacen se están posponiendo continuamente, y esto pasa en Cuenca y en el resto del país. Además, algunas giras se han suspendido, como las grandes con importantes montajes, y otras compañías directamente han dejado de girar. Y de todo esto la cultura se resiente y nosotros tenemos la responsabilidad de apostar por la cultura, de seguir programando pese a las circunstancias, de adaptarnos.

Y ¿qué pasa con los espectadores?

Me gustaría también destacar el apoyo recibido por los espectadores. El pasado trimestre la verdad es que la respuesta de los espectadores fue increíble. Hay que agradecer al público que haya asistido a los espectáculos y que haya tenido un comportamiento impecable ante los protocolos marcados. Es necesario agradecérselo. Lo mismo que hay que agradecer a las compañías que sigan trabajando. A pesar del corte intermitente de la cultura, da la impresión de que el público tiene más ganas de disfrutar. Se ve alegría, se ve un poco de esperanza. Y esto es digno de comentar. Incluso las compañías desde el escenario aplauden también a los espectadores por ir e incluso con estos aforos tan reducidos sobre lo habitual.

¿Han llegado a poner el cartel de que no quedaban entradas en este tiempo de pandemia?

Sí. De hecho el agradecimiento que hago también lo hago por esto. En muy poquitos espectáculos sobran entradas, en seguida se han llenado la práctica totalidad.

¿Cuántas personas pueden entrar ahora?

En un aforo normal estamos en torno a las 800 personas en la sala grade. Ahora mismo estamos en un aforo de 228 personas. Y aún así estamos haciendo el esfuerzo de hacer una programación como si no existiera reducción y este esfuerzo, además, tampoco lo nota económicamente el público, pues los precios los estamos manteniendo como estaban antes.

¿Puede recordarnos, no obstante, cuánto cuesta la entrada?

Depende de los espectáculos y luego están las reducciones a las familias numerosas, a personas en situación de desempleo o a los jóvenes y ahora hemos incluido a los mayores de 65 años Las que no están reducidas, están entre los ocho euros de los espectáculos infantiles a los 15 euros del teatro. La cultura no es para nada cara y nuestros precios son asumibles.

A la hora de hacer la programación, ¿qué líneas siguen?

Que sea muy variada, con presencia del mayor número de disciplinas, que haya novedades y que sea para todo tipo de públicos. Y en estos tiempos de pandemia, la primera condición es recuperar lo que no se ha podido hacer y a partir de ahí, continuar. Si no recuerdo mal, si abrimos en octubre al poco nos volvieron cerrar durante tiempo y luego diciembre fue un mes muy activo con actuaciones incluso de martes a domingo, precisamente porque nos tocó reorganizar y recuperar lo que se pudo y lo que no se pudo, es lo que vamos a recuperar ahora. La intención no es cancelar sino retrasar. Normalmente hacemos dos actuaciones por semana, normalmente entre jueves y sábado, pero esto, no obstante, puede variar. Esto también se puede aplicar a las funciones con una o en el caso de Ara Malikian con dos funciones.

Y, ¿qué presencia tiene lo de aquí?

Tendemos a tener un equilibrio. Buscamos a gente de fuera pero también apoyamos a la gente de aquí. De hecho, traemos una compañía que es conquense, ‘La máquina real’ que estaba programada para la anterior pero hubo que posponer y tenemos una propuesta teatral que ha tenido mucho éxito en Madrid y que cuenta con una actriz conquense, Beatriz Grimaldos, y que también estará con nosotros. Es Sólo un metro de distancia. Vamos alternando.

El 5 de febrero será la primera actuación del programa del primer trimestre del año. Pero ¿cuáles van a ser las siguientes?

Lo primero va a ser un ciclo dedicado a Beethoven y del que quedaron pendientes tres de los cinco conciertos que había organizados . Creemos y tengo la esperanza de poder hacerlos los días 5, 6 y 12 de febrero, a las 20:30 horas.

La programación dura hasta marzo y habrá, además, de este ciclo, una velada musical el día 18 con la Orquesta de Cámara Orfeo; teatro con Beatriz Grimaldos el día 20; noche de danza el día 25; velada musical el día 27 con Ara Malikian a las 18:00 y 20:30 horas; noche de teatro el 6 de marzo con Ricardo III y con Israel Elejalde, entre otros actores; velada musical el 9 de marzo con Esemble del proyecto CompositorAs; velada musical el 11 de marzo con Helsinki Baroque Orchestra; el pequeño auditorio el día 13 con La Principita, y noche de teatro el día 18 con La selva sin amor.