Ya está aquí de nuevo. A la vuelta de la esquina asoma la cita solidaria nazarena por excelencia. Se ha convertido en un clásico que en cada comienzo de verano la comunidad semanasantera de la ciudad una sus esfuerzos, a través del deporte, por una causa tan noble como recaudar fondos para diferentes colectivos de carácter asistencial. El Torneo Nazareno Solidario de fútbol 7, que este año alcanza su quinta edición, mantendrá el listón con respecto al año pasado. De esta forma, participarán 18 hermandades –solo una menos que en 2018– y en torno a unos 250 jugadores. En este sentido, no repiten con respecto a la edición anterior tres cofradías: Jesús de Medinaceli, Jesús del Puente y Jesús con la Caña. Sin embargo, dos se estrenan: El Cristo de la Agonía y La Exaltación.

La recaudación obtenida el año pasado ascendió a 3.159,28 euros (2.760 procedentes de la participación de los jugadores y, el resto, a cargo de los patrocinadores –Café Bar Don Julián, Modas Heras, Inmobiliaria Eurolar y Ferretería San José– y de la Diputación Provincial). Tras restar los gastos derivados de la propia preparación del campeonato, la cantidad quedó en 2.776,80 euros. La organización entregó 644,20 euros a cada una de las Cáritas parroquiales de Santa Ana, El Salvador, Cristo del Amparo y San Antón. Además, la asociación de Esclerosis múltiple de Cuenca (Ademcu) recibió otros 200 euros.

El lugar de disputa de todos los partidos, como es habitual, será en el recién nombrado campo de fútbol Joaquín Caparrós (anteriormente conocido como La Bene). Los horarios de las jornadas también serán los mismos: de nueve de la mañana a dos de la tarde y de cuatro de la tarde a nueve de la noche. Paula Vicente, desde la organización del torneo, se congratula por la notable participación y espera que esta edición sea tan «exitosa» como el resto. «Hacemos esto con el fin último de recaudar fondos para una buena causa, y por eso es de valorar todo lo que se involucran las hermandades», recalca. No es casual que este campeonato alcance ya la quinta edición. Eso habla muy bien de aquellos que lo promueven. «Lo hacemos entre todos; arrimamos el hombro y el resultado depende del esfuerzo que nosotros pongamos», finaliza.