En las Cortes ganó la propuesta salomónica de Ciudadanos

L.G.E.
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El presidente de las Cortes ha explicado que el PSOE propuso un cupo de iniciativas por pleno según el número de diputados, pero que al final se eligió el criterio de Ciudadanos de dar las mismas oportunidades a todos

En las Cortes ganó la propuesta salomónica de Ciudadanos - Foto: Ví­ctor Ballesteros

El presidente de las Cortes, Pablo Bellido, negó que los nuevos límites de iniciativas para los debates se hayan aprobado por «rodillo», que es la queja que hace el PP.  «Dos grupos estaban de acuerdo y uno no», expuso, «eso no es un rodillo». Es más, desveló que el criterio finalmente aprobado no fue estrictamente el que llevó el PSOE, a pesar de ser con diferencia el grupo parlamentario que tiene mayoría absoluta.

«El criterio del PSOE era el de establecer un sistema proporcional», expuso. Eso implicará que el número de iniciativas que se podrían debatir en pleno dependería del número de diputados de cada grupo. Bellido contó que la propuesta del PP era no poner ningún límite al número de puntos que se pueden llevar, como se ha funcionado hasta ahora. «La del PP era la de la desregulación, que no hubiese ninguna regla», resumió el presidente de las Cortes. Ciudadanos, por su parte, sugirió que «todos tuviesen las mismas oportunidades». Y eso fue lo que se eligió, limitando el cupo de iniciativas para todos los grupos en dos debates y tres preguntas por pleno.

«No se ha querido elegir la propuesta de PSOE, el grupo mayoritario de las Cortes, sino del minoritario, que daba oportunidades a todos», indicó. Bellido añadió además que esto pone fin a que sea el presidente de las Cortes el que decida de manera discrecional cuántas iniciativas se llevan al Parlamento. «Esto lo que hace es reforzar la democracia», indicó, «el que se autolimita soy yo, que podría hacer lo que quisiera, como en el pasado, y le estoy dando a todos los grupos unas reglas». Defendió que de esta manera se ofrece a todos los grupos parlamentarios «un instrumento claro, ordenado, previsible, para que todos tengan las mismas oportunidades y sepan a qué atenerse».

«Para modernizarnos». Bellido se mostró dispuesto a hacer más cambios en el reglamento de las Cortes. Señaló su compromiso de «establecer todos los mecanismos de reforma de un reglamento que tiene que ajustarse lo más posible al de las Cortes generales». Pero no solo coloca el espejo en el Congreso de los Diputados, sino que también quiere ver qué se hace en otros parlamentos autonómicos «para modernizarnos».

Quiere que el sistema sea más abierto a la ciudadanía y contar con las participación de los grupos para «sumar y buscar soluciones conjuntamente». Lo que no quiere es que den «una sensación de confrontación que no es real».