Dentro de la última sesión plenaria primaveral, casi por completo monopolizada por el derrumbe de la calle Canónigos, ha habido espacio para un asunto mucho más agradable y en el que no hubo discusión alguna ni polos de confrontación. La Corporación municipal ha acordado por unanimidad darle el nombre de Paulino Fernández Calvo a la pista central del complejo polideportivo El Sargal.

Paulino Fernández Calvo es uno de los nombres propios más importantes dentro del deporte conquense, y es que su vida por completo ha estado vinculada a este ámbito. A sus 87 años de edad, hay que destacar que su vinculación con el CB Cuenca, cuyas riendas maneja ahora mismo desde la Presidencia, se extiende durante más de medio siglo, ya que fue jugador en la década de los años 50. También ejerció como árbitro y fue presidente de la Federación Provincial de Baloncesto, además de concejal de Deportes durante dos legislaturas, en el gobierno y en la oposición.

El concejal de Turismo, Patrimonio Histórico, Cultura y Educación, Miguel Ángel Valero, recalcó la dilatada trayectoria y los logros de Fernández Calvo, que destacó en casi todas las disciplinas “en las que se vertebra el deporte conquense”, especialmente en baloncesto, donde fue “uno de los jugadores más sobresalientes del equipo conquense hasta que una lesión en la muñeca le obligó a retirarse”. Como edil del Consistorio, hizo hincapié en que fue el artífice de la construcción del pabellón San Fernando, además de constituir el Instituto Municipal de Deportes. “Lo más meritorio”, remató Valero, “es que sigue en la brecha”.

El alcalde, Darío Dolz, comentó por su parte que Fernández Calvo ha sido un “promotor indiscutible del deporte en nuestra ciudad”, por lo que es “más que justo hacer este reconocimiento”.