Desde Minglanilla a... ¿quién sabe?, alcanzar la cima en un mundo tan complejo como el de la moda y el estilismo. Una conquense de tan solo 21 años defenderá a Castilla-La Mancha en el certamen de belleza por excelencia: Miss España. Miriam, criada en este municipio de la Manchuela, se encuentra «tranquila». Ya ha conseguido superar un escalón «muy importante», como es la eliminatoria regional.
Tras ser seleccionada junto a otras dos representantes castellano-manchegas, el pasado 19 de enero se celebró en Madrid la semifinal que aupó a Miriam a la final que tendrá lugar en las próximas semanas. En esta eliminatoria tuvo que pasar varias pruebas y llevar a cabo diferentes actividades. En ellas no solo se tenía en cuenta la apariencia física, sino también, como ella misma explica, «la calidad humana». El jurado, que suponía un 60% de los votos, y el apoyo que le tributaron en las redes sociales, que representaban el 40% restante, creyeron que esta minglanillera era la mejor opción para defender la bandera regional.
Miriam quiere, sobre todo y ante todo, «disfrutar de la experiencia», pues para ella es un «sueño» el mero hecho de haber llegado a donde ha llegado, y es que «ni por asomo» se imaginaba que podría ser la elegida. Por esa razón, no se obsesiona por lo que pueda pasar en el certamen nacional. Es algo que no le quita el sueño, aunque eso sí, «nunca se sabe...». Solo quiere vivir el momento. Carpe diem.
Su entorno tiene el mismo objetivo que ella. Lo que quieren, fundamentalmente, es que sea «feliz» y que «disfrute la experiencia». Por eso no la condicionan en «absolutamente nada» y le muestran un «apoyo» incondicional. Su madre ha jugado un papel clave en todo esto, y es que fue ella quien le animó a presentarse. Miriam dio el paso y lo hizo convencida, ya que «desde bien pequeñita» le ha encantado la moda y el estilismo. «Desde siempre he sido supercoqueta y me encanta arreglarme», destaca orgullosa. Tanto es así que «ya he hecho varios desfiles y fotografías».
Ahora bien, Miriam cree que todo esto «no está reñido» con ser una chica culta, interesante y con un gran fondo interior. Es más, si todo marcha como debe, este año terminará sus estudios de Dietética y Nutrición en Valencia, para comenzar de inmediato Enfermería y Terapia Ocupacional.
Por esa razón, destaca que en el certamen de Miss y Míster España no solo buscan un «cuerpo bonito», sino que quieren una persona «completa» por dentro y por fuera. «No solo se fijan en la belleza exterior, sino también en que seas buena persona, en que te relaciones correctamente con tus compañeras o en cómo te expresas», argumenta. Todo eso se valora para tener en cuenta la puntuación final.
Y, lo que es más importante, ella participa en este proceso «encantada». En el certamen hay «tanto hombres como mujeres, y se utilizan los dos cánones de belleza», apunta. Además, continúa, «tanto los chicos como las chicas que participamos lo hacemos voluntariamente... Nadie nos obliga hacerlo ni nos ponen una pistola en la cabeza». Es mucho más sencillo que todo eso, tal y como se desprende de las palabras de Miriam: «Lo hacemos porque nos gusta la moda y el mundo del estilismo; para nosotros es un hobby, vamos a por todas en este sentido y es algo que no menoscaba nuestra dignidad como personas».
Con unos principios tan bien asentados y argumentados, esta conquense luchará por hacerse con la corona de reina. Si eso llegara a pasar, ¿qué camino se abriría para Miriam? «Es una pregunta difícil», recalca. «Ahora mismo me centro en terminar mi carrera y en el certamen nacional y luego, conforme sucedan las cosas, ya veremos... porque nunca se sabe», sentencia. Ella quiere ir «poco a poco» y, como se suele decir, «lo que tenga que venir, ya vendrá».