Una nueva coalición de villanos se alza para hacerse con el poder. Los seguidores de Hearthstone de todo el mundo, van a tener la oportunidad de cometer todas las fechorías que se les ocurran en El Auge de las Sombras.
A partir del 9 de abril, los aficionados podrán unirse a una amalgama de malhechores, para escribir la primera historia de larga duración de la franquicia, con 135 malévolas cartas nuevas y retorcidas mecánicas originales.
Tras sufrir una dolorosa derrota a manos de la Liga de Expedicionarios, Rafaam se dio cuenta de que sus siniestros planes requerían de mucha más picaresca. En los años transcurridos desde dichos acontecimientos, este infame personaje ha morado entre las sombras, formando una Liga del Mal con los mayores antagonistas que Hearthstone jamás haya conocido.
Un auténtico grupo de supervillanos de expansiones anteriores, entre los que se incluyen el rey Togafloja, madame Lazul, el incontrolable Dr. Bum y la bruja Hagatha. En El Auge de las Sombras, estos malhechores sacarán a relucir sus oscuras intenciones, pero esta vez con ayuda de aquellos jugadores a los que no les importe ensuciarse las manos.
Además de un séquito de usuarios tan prometedor, la Liga del Mal también cuenta con una horda de esbirros que tiene una diabólica variedad de gritos de batalla. Estos subalternos de bajo nivel, resultarán esenciales a la hora de ejecutar los pérfidos planes de Rafaam.
Y por si el músculo y el cerebro no fuesen ya suficientes, estos villanos tienen aún más trucos escondidos en la manga: cartas cuyos efectos son un homenaje a otras expansiones de Hearthstone. Esto dará a los aficionados nuevas posibilidades para desarrollar estrategias.
Los jugadores que deseen unirse a las filas de la Liga del Mal harán bien en cubrirse las espaldas, ya que es muy probable que terminen convirtiéndose en el objetivo de un grupo de justicieros, conocidos como los Defensores de Dalaran. Estos formidables guardianes son temidos por sus hechizos dobles: una potente magia que, una vez lanzada, genera una copia de sí misma que puede ser utilizada de nuevo en el enfrentamiento.