Al menos 27 personas han muerto y 55 han resultado heridas este viernes como consecuencia de un ataque perpetrado por hombres armados en un acto de homenaje a un político hazara en el que participaba el primer ministro afgano, Abdulá Abdulá, según han informado las autoridades afganas.

El jefe del Alto Consejo para la Paz, Mohamad Karim Jalili, que estaba dando su discurso cuando han comenzado los disparos, ha confirmado en una entrevista con la cadena de televisión local Tolo que el ataque ha acabado con la vida de 27 personas.

Un reportero de la cadena ha dicho que el primer ministro afgano ha abandonado el acto y que el ataque ha comenzado con disparos realizados desde un edificio en construcción cercano al lugar de la ceremonia. Tras los primeros disparos, se ha registrado un tiroteo.

El acto atacado es una ceremonia en memoria de Abdul Alí Mazari, un líder político hazara que fue secuestrado y asesinado por los talibanes en 1995. El ataque se ha registrado cuando estaba dando su discurso el jefe del Alto Consejo para la Paz de Afganistán.

Nasrat Rahimi, portavoz del Ministerio del Interior, ha confirmado el ataque y ha dicho que todos los altos cargos y líderes políticos han sido trasladados a "un lugar seguro". "La Policía Nacional y unidades especiales de la Policía se han desplegado en la zona", ha explicado, en un mensaje publicado en su cuenta de la red social Twitter.

El portavoz de Abdulá, Fridoon Jawazoon, ha contado que Abdulá ha sido evacuado de forma segura junto a otros líderes políticos afganos que participaban en el acto. "La situación todavía no está clara", ha indicado. "El objetivo del ataque no está claro", ha añadido.

Por su parte, el portavoz de los talibanes afganos, Zabihulá Muyahid, ha negado que sus milicianos estén vinculados con el ataque de este viernes en el oeste de Kabul.

Desde su cuenta de Twitter, el presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, ha condenado el ataque, que ha definido como "un crimen contra la humanidad" contra el Gobierno de unidad nacional de Afganistán, y ha trasladado su solidaridad y apoyo a Abdulá y a Jalili.

El ataque de este viernes en el oeste de Kabul llega días después de que los talibanes firmaran el 29 de febrero en Doha un acuerdo de paz con Estados Unidos que contempla un calendario de retirada de todas las tropas internacionales en los próximos meses y la apertura de una mesa de diálogo entre líderes afganos, aunque no establece un alto el fuego.

Dos días después de firmar el pacto, los talibanes anunciaron que reanudan los ataques contra las fuerzas de seguridad y el Ejército afgano y exigieron al Gobierno de Kabul que acepte el intercambio de presos contemplado en el acuerdo de paz con Estados Unidos como medida para generar confianza antes del diálogo afgano.