Desde los orígenes del hombre

J. López
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Los hallazgos de gran cantidad de materiales líticos y de restos de fauna confirman que el yacimiento paleontológico de El Provencio «es un punto excepcional para estudiar el comportamiento de diferentes tipos de humanos de la península ibérica»

Desde los orígenes del hombre

Los últimos hallazgos descubiertos en el yacimiento paleontológico de El Provencio confirman que en esta parte de la provincia conquense hubo «una gran cantidad de seres humanos». Pese al cambio del clima, a las etapas glaciares o a las subidas de temperatura, la riqueza y abrumadora cantidad de industria lítica encontrada en las excavaciones que desarrolla Ares Arqueología y Patrimonio Cultural convierten a El Provencio «en un punto excepcional para estudiar el comportamiento de diferentes tipos de humanos de la península ibérica».

Así lo confirma uno de los arqueólogos y directores de este proyecto, Santiago David Domínguez, quien tras las últimas prospecciones afirma haber comprobado que «hay una ocupación continuada en esta parte del centro de la península ibérica. Antes se hablaba de que se poblaba más la costa y menos el interior, pero estamos viendo que hay continuidad igual que en Atapuerca». 

En esta sexta campaña también se han encontrado restos paleontológicos, de fauna de gran tamaño, caso de elefantes –mammuthus meridionalis o armeniacus–, rinocerontes y un caballo prehistórico. 

Desde los orígenes del hombreDesde los orígenes del hombre«Nos dimos cuenta de que en las canteras de las décadas de los 80 y 90 se profundizó en los estratos paleolíticos y se llegó a niveles del Pleistoceno. Se erosionó en estos grandes estratos de concentración de elementos prehistóricos», dice Domínguez, quien corrobora que la gran cantidad de materiales hallados están datados desde 800.000 años antes de la Era Común, hasta el año 40.000 aproximadamente, e incluyen utensilios del musteriense y herramientas de sílex fabricados por neardenthales en una superficie de varios kilómetros alrededor del río Záncara. Incluso hay información de estratos superiores más próximos en el tiempo. 

«En las terrazas del río han vivido seres humanos desde el origen de la Humanidad, desde el Paleolítico Inferior, del homo antecessor, e heidelbergensis hasta los neanderthales, sapiens, y después de forma continua, cazan y recolectan los animales y los recursos vegetales que se concentran en el cauce fluvial», cuenta el arqueólogo de Ares Arqueología. 

Dada la importancia de los descubrimientos, en las tareas de investigación colaboran varios técnicos del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (Cenieh), responsables de la conservación, restauración y registro de colecciones paleontológicas como las de Atapuerca y principales investigadores de la evolución humana durante el periodo Cuaternario. 

Se trata de los geólogos Fernando Ivón Cermeño y David Uribelarrea, a los que se añade el prestigioso investigador Alfredo Pérez González como colaborador. Además, las prospecciones han contado con la técnico Elena Aznar y durante las mismas han participado seis estudiantes de universidades de Madrid o Asturias, becados por el Ayuntamiento de El Provencio. Cabe recordar que la administración provenciana apuesta en las últimas legislaturas por promover y financiar los trabajos arqueológicos. Además, las excavaciones cuentan con la autorización de la Junta de Comunidades.

Desde 2012. El yacimiento forma parte del proyecto del Paleolítico Inferior y Medio en la provincia que se lleva a cabo desde 2012 y recorre otras localidades conquenses como Carrascosa del Campo, Huete, Garcinarro o Arcas, entre otras. El estudio, impulsado por equipo de Ares Arqueología y Patrimonio Cultural, con la investigación de los arqueólogos Santiago Domínguez y Michel Muñoz, tiene como objetivo «conocer el comportamiento humano de las especies diferentes al homo sapiens».