Patrimonio marcado en rojo

J. López
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La Lista Roja del Patrimonio mantiene 16 bienes históricos en la provincia, de los que 11 están en serio peligro de derrumbe

Patrimonio marcado en rojo - Foto: Reyes MartÁ­nez

Un semáforo en rojo, un aviso de alerta roja por meteorología adversa, o la zona roja que se delimita tras un conflicto bélico. El color rojo se usa como código para determinar algo negativo. De hecho, en finanzas, estar en números rojos es entrar en bancarrota y cuando se dice que alguien está al rojo vivo es que está irritado o alterado. En patrimonio, desde 2007 existe la llamada Lista Roja creada para señalar y dar a conocer todos aquellos bienes patrimoniales –yacimientos, conjuntos históricos, edificios singulares, palacios, fuertes, murallas, castillos, torres o yacimientos arqueológicos, entre otros– que han sido abandonados y que están en serio riesgo de desaparecer. La Asociación Hispania Nostra se encarga de recoger la información, clasificarla en fichas y darla a conocer a la sociedad para que tenga conocimiento y actúe. De hecho, muchos de los bienes que han sido incluidos durante estos 12 años han logrado desclasificarse y pasar a la Lista Verde. Otros, por desgracia, forman parte de la denominada  Lista Negra: aquellos bienes en los que se intervino y se alteraron de forma irreversible sus valores esenciales. 

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Patrimonio marcado en rojo - Foto: Reyes MartÁ­nez
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Patrimonio marcado en rojo - Foto: Reyes MartÁ­nez

16 en cuenca. Hispania Nostra localiza en la actualidad 898 fichas en el país, de las que 733 se consideran en serio peligro y 158 se han descatalogado tras su recuperación. En la provincia conquense, la Lista Roja del Patrimonio mantiene 16 bienes de los que 11 siguen estando en peligro y cinco han sido descatalogados por las intervenciones realizadas. Una casona donde estuvo alojada Santa Teresa de Jesús, varios castillos que formaron parte de la Orden de Santiago, un hospital del siglo XV para «curar enfermos pobres y hospedar peregrinos», o el palacio de estilo versallesco construido para una rica familia que se dedicaba a la industria papelera. Estos son algunos de las singulares edificaciones que ya tienen colgado el cartel de ‘Peligro de Hundimiento’ en Cuenca.  Es el caso del Palacio de los Gosálvez, en el término municipal de Casas de Benítez, que mandó construir en 1902 el empresario Enrique Gosálvez-Fuentes. El singular edificio art decó, de tres plantas y dos alas, está situado en una orilla del Júcar, frente a la localidad de Villalgordo del Júcar (Albacete). Allí, el acaudalado industrial se dedicaba a la venta de papelería y de productos agroalimentarios, caso de mermeladas, que se fabricaban en la finca sus empleados. Como anécdota, en el centro del palacio había una fuente que regaló a la familia Gosálvez la esposa del zar ruso Nicolás II, Alejandra. Dado su grave estado de deterioro, la Asociación de Amigos del Palacio de los Gosálvez y su entorno organizó una marcha en agosto para reclamar ayudas.  En la lista también se incluye el Castillo de la Puebla de Almenara; el Monasterio de Santo Domingo de Guzmán de Huete; el Convento de Nuestra Señora del Rosal, en Priego; y el Castillejo de Luján, en el término municipal de Saelices. La primera fortaleza data de principios del siglo XIII, conserva parte de su muralla, la torre del Homenaje y un patio central con aljibe. El Monasterio de la localidad optense fue fundado en 1393, gracias a las donaciones de Doña Catalina de Lancaster, reina de Castilla y señora de Huete, y fue uno de los edificios más importante de la Orden Dominica. Su iglesia fue construida en 1620 por fray Alberto de la Madre de Dios, arquitecto del rey Felipe II y del duque de Lerma.  El convento de la población pricense fue fundado por Diego Hurtado de Mendoza en 1525 y cuenta con una iglesia de una sola nave con cabecera poligonal y claustro. Parte de la arquería de medio punto sigue aún en pie. La vegetación también se ha ido comiendo poco a poco el Castillejo de Luján, próximo a la ciudad romana de Segóbriga. Este fuerte del siglo XVI conserva aún los muros de sillería y varias torres en pie. Además de estos bienes patrimoniales, la Lista Roja añade enCuenca el Castillo de Haro (Villaescusa de Haro), el Palacio Tello de Meneses o Casa Sandoval (Pozoamargo), el Castillo de Santiago de la Torre (El Provencio), la Casa de los Linajes de los Salcedo (Huete), y el Hospital de San Andrés (Belmonte).