El guardameta del Oporto, Iker Casillas, que se recupera de un infarto de miocardio sufrido el miércoles durante un entrenamiento, seguirá ingresado en un hospital de la ciudad lusa durante unos días y el lunes podría recibir el alta, tras abandonar esta tarde la unidad de cuidados intensivos por su favorable evolución.
Casillas "pasó para cuidados intermedios y todos los parámetros evolucionan dentro de la normalidad", señaló el Oporto en un comunicado. El guardameta, que no presenta complicaciones, muestra "buena disposición y el sentido del humor habitual", añadió el club.
Por su parte, la comunicadora española Sara Carbonero, esposa de Casillas, apuntó hoy que el jugador podría salir en unos días, probablemente el lunes, en unas breves declaraciones a los medios a su llegada al hospital CUF de Oporto.
"Está bien, siguiendo los protocolos médicos que se le han puesto. En principio, estará dos días más y la idea es que salga del hospital el lunes. Continúa bien la evolución, según lo previsto", explicó.
Carbonero aseguró que Casillas evoluciona bien y se encuentra animado, pero evitó entrar en detalles técnicos y se remitió a los informes médicos.
En la tarde de hoy, la plantilla del Oporto visitará al jugador, según confirmó hoy en rueda de prensa el técnico del club, Sérgio Conceiçao. El entrenador también dio más detalles sobre los hechos que ocurrieron durante la mañana del miércoles.
Según sus palabras, Iker, junto al resto de porteros, estaba realizando ejercicios específicos cuando comenzó a sentirse indispuesto. El primero en intervenir fue el fisioterapeuta, que alertó al doctor del equipo luso, Nelson Puga. Gracias a la rápida intervención de ambos, media hora después Casillas ya tenía un diagnóstico y se encontraba bajo supervisión médica.
"El equipo está con él", explicó Conceiçao quien no se preocupó por la vuelta, o no, del español a los campos de fútbol, "el fútbol forma parte de la vida, pero la vida en sí es más importante que todo lo demás".
Mourinho también se preocupó por el estado de salud de Casillas
Quien fuera entrenador del Real Madrid y mano ejecutora de la salida del portero del club blanco, José Mourinho, ha mostrado su interés por el estado de Casillas. "Lamento lo que pasó. Llamé al Oporto inmediatamente para saber qué había pasado. Está en buenas manos. El Oporto tiene un departamento médico fantástico, uno de los mejores con los que he trabajado", declaró el técnico, actualmente en paro, en su espacio On the Touchline with Jose Mourinho en el canal televisivo Russia Today.
Unas palabras que sorprendieron dada la relación que une a ambos. "Todo el mundo sabe que en un momento determinado, cuando decidí sacarlo del equipo, hubo una pequeña confrontación de, no digo egos, sino una confrontación del capitán del Real Madrid y el entrenador del Real Madrid. Pero nuestra relación es positiva, no es como la gente piensa", señaló el portugués.