Una pequeña gran joya

Leo Cortijo
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La hermandad de Jesús con la Caña engrandece su patrimonio artístico con un pequeño óleo de su Imagen para el libro de constituciones, obra del pintor sevillano Antonio Díaz Arnido, cartelista de la Pasión del año que viene

Una pequeña gran joya

El patrimonio artístico y cultural de Nuestro Padre Jesús con la Caña aumenta y lo hace con una pequeña gran joya. Se trata de una miniatura pintada por Antonio Díaz Arnido para el libro de constituciones de la hermandad. La pieza, de unos 10 centímetros de alta por seis de ancha, es un óleo sobre pino de Flandes con la imagen que cada Jueves Santo procesiona de forma majestuosa por las calles de Cuenca. La pintura se completa con un óvalo de orfebrería en plata, que ha sido donado por la junta directiva de la cofradía. Este conjunto central se suma a las cantoneras y al terciopelo rojo que ya existían en el libro.

Mikel Rubio, secretario de la hermandad, transmite la «enorme alegría y satisfacción» que hay en el seno de Jesús con la Caña por el «sobresaliente» resultado de la obra, y es que «no puede haber más grado de detalle en una pintura de tan pequeño tamaño». Además, Díaz Arnido –que será el cartelista de la Semana de Pasión del año que viene– es un «muy buen amigo» de esta cofradía, pues mantienen relación desde hace tres años cuando, según explica Rubio, contactaron para que el artista sevillano pintara dos estandartes de la hermandad de la Virgen de Riánsares de Tarancón. De esta forma, este óleo de Jesús con la Caña es la tercera obra que Díaz Arnido firma en la Diócesis conquense.

Tal y como apunta Rubio, Díaz Arnido accedió de muy buen grado a pintar esta pequeña pieza, y es que además ya tenía experiencia en trabajos similares para cofradías del sur de España. Así, aprovechando un viaje del artista sevillano a Cuenca el pasado fin de semana, él mismo depositó el libro de constituciones en la Capilla de la Coronación de Espinas que la cofradía conquense tiene en la Catedral. Ahí permanecerá expuesto hasta finales del mes que viene. A partir de entonces, el libro se lucirá en el altar de cultos cuando la hermandad los celebre, así como en la procesión de Paz y Caridad.