Adaptarse a las circunstancias

Leo Cortijo
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Las hermandades modifican total o parcialmente sus cultos cuaresmales para cumplir con la hoja de ruta que marca la pandemia

El besapié de Medinaceli se sustituye por una inclinación de cabeza (archivo). - Foto: Reyes Martí­nez

En este momento del año, en plena Cuaresma, la actividad en el seno de las hermandades conquenses sería mayúscula si la situación no fuera la que es y el mundo no viviera constantemente amenazado por un enemigo tan invisible como dañino. Ahora bien, las cofradías están dando un auténtico ejemplo. Como no puede ser de otra manera, todas están condicionando en mayor o menor grado sus cultos cuaresmales y siguen la hoja de ruta que marca la normativa sanitaria vigente en cada instante. Unas optan por suspender total o parcialmente sus actos, y otras por desarrollarlos con numerosas restricciones.

Así, por ejemplo, la hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno del Puente, que ayer arrancó sus cultos con la celebración del triduo, limita el aforo de la iglesia de la Virgen de la Luz por estricto orden de llegada. Eso sí, para que ningún hermano se quede sin disfrutar de los cultos, la cofradía se ha subido al carro de las nuevas tecnologías con el fin de facilitar la asistencia virtual a los mismos. Lo hace gracias al canal de YouTube de la parroquia, algo que ha sido muy aplaudido por los fieles. Además, en breve volverá a estar operativa la página web, después del proceso de reforma y actualización de los últimos meses.

Uno de los actos centrales de la Cuaresma conquense es el besapié a Jesús de Medinaceli, que por segundo año consecutivo vuelve a adaptarse a las necesidades del guión. Este viernes la hermandad pone el broche a sus actos con la adoración a la Sagrada Imagen en la iglesia de San Felipe, pero eso sí, el gesto de besar los pies de la talla se sustituye por una inclinación de cabeza. Algo totalmente comprensible como medida de seguridad y en la línea de lo que están haciendo todas las esclavitudes del Medinaceli a nivel nacional. Asimismo, a lo largo de la jornada se respetará en todo momento la limitación de aforo en el templo, así como la distancia de seguridad entre los feligreses.

La Negación de San Pedro, por su parte, ha sido más drástica en este sentido. Debido al desarrollo de la pandemia y con el fin de «mitigar en lo posible la propagación del virus», la hermandad del Miércoles Santo decidió suspender todos sus actos, desde la junta general hasta la misa por los hermanos difuntos, pasando por la función religiosa. De la misma forma, por «prudencia y responsabilidad», la hermandad de Jesús Amarrado a la Columna suspendió su tradicional vía crucis por las calles del barrio de San Antón durante el primer viernes de Cuaresma. No obstante, sí tuvo lugar la misa previa cumpliendo con las medidas oportunas, como la ausencia de la imagen en el altar mayor. El Huerto de San Antón, por otra parte, aunque no celebrará sus juntas generales, sí mantiene los actos litúrgicos para los días 14 y 15, retransmitidos además en YouTube.

Nuevos métodos. La Junta de Cofradías, dentro de su programa de actividades presenciales y virtuales diseñado con el objetivo de «mantener viva la llama» de la Semana Santa entre los nazarenos conquenses, ha lanzado un juego online de preguntas y respuestas para poner a prueba los conocimientos sobre la Semana de Pasión. Tras el éxito rotundo del escape room ‘El Enigma Sagrado’, que agotó en pocas horas las plazas habilitadas para las sesiones previstas, la institución nazarena continúa planteando actividades a la comunidad nazarena, para que vivan esta Semana Santa de una forma original y alternativa.