El presidente de la patronal regional se lo ha advertido hoy al consejero de Hacienda. "Le hemos trasladado esa preocupación por los riesgos que se están poniendo para la recuperación de la economía con la inflación o los precios de los combustibles", contó Ángel Nicolás, presidente de Cecam, después de haberse reunido con Juan Alfonso Ruiz Molina para analizar los presupuestos.

El consejero apuntó que la situación se escapa bastante de sus competencias porque es un problema global. "Quiero pensar que es coyuntural", manifestó. Reconoce que una inflación en el 5% es "preocupante", pero se muestra optimista y espera que sea menor a 31 de diciembre.

Ruiz Molina explica que lo de que hubiera inflación tras la crisis "era lógico, porque había tensión de demanda respecto a la oferta". Ahora bien, señala que la presidenta de la Comisión Europea ya ha reconocido que está durando más de lo que pensaba y además "se ha juntado con el incremento de la energía eléctrica y los combustibles fósiles".

Y no es la única derivada de este problema, también con dimensiones globales. El consejero apuntó que parte de la inflación también se debe a la escasez de suministros y puso el ejemplo de los chip para la industria automovilística o del acero, "que está perjudicando a Europa, fundamentalmente por acumulación de esta materia prima en países asiáticos".

Ruiz Molina también apunta que la evolución del consumo puede depender tanto del miedo que pueda haber entre las familias, lo que podría reducir esas expectativas, pero también se podría aumentar dicho consumo por el ahorro que se ha acumulado en algunos hogares durante esta fase de pandemia. Espera que Bruselas esté atenta y actúe para despejar nubarrones. "Hay que disipar las dudas y que haya firmeza en las decisiones que se adopten a nivel europeo", apostilló.