Sacar la cabeza

José Luis Royo
-

El CN Cuenca trata de volver a la normalidad tras pasar el año más duro de su historia

Un nadador del CN Cuenca se entrena en la piscina Silvia Lara. - Foto: Lola Pineda

El Club Natación Cuenca comienza a ver la luz al final del túnel tras un año negro para este deporte en el que no ha habido competiciones y en el que, debido a las restricciones sanitarias, prácticamente no han podido entrenarse en la piscina.

Los nadadores del CN Cuenca empezaron a entrenarse a finales de diciembre, «después de un año en el dique seco», indica su presidente David Ocaña, y todo ello sin competiciones a la vista hasta que hace un mes Hugo Valera compitió en el Campeonato Regional Alevín, mientras que la semana pasada tres nadadores más -Adrián Romero, Estefanía Andrés y Aitor Ballestero-, participaron en el Regional Júnior, Sénior y Absoluto. «Los nadadores están con muchas ganas, pero desgraciadamente no pueden participar los que quisieran porque, aunque la mayoría tiene mínimas para hacerlo, por temas de aforo cogen los mejores tiempos para cada competición y nos ha sido complicado meter a mas participantes».

Todo ello tras un año muy duro para un deporte como la natación que precisa de instalaciones cerradas. «Ha sido un año muy angustioso, no veíamos nunca el momento de comenzar y aunque sabíamos por estudios que en las instalaciones deportivas como las nuestras, por la emanación de cloro en el ambiente, eran zonas seguras, pero Sanidad decidió no dejarnos entrenar hasta finales de diciembre», explica el presidente del CN Cuenca y todo ello después de «pelear mucho con escritos, normativa, protocolos de la Federación, de Sanidad, del propio club. Hemos tenido mucha batalla administrativa para que nos dejaran entrenar».

Varios componentes del club posan para La Tribuna.Varios componentes del club posan para La Tribuna. - Foto: Lola PinedaLlevan entrenado cuatro meses y lo hacen con muchas limitaciones. Antes había entre 12 y 15 nadadores por cada calle de la piscina y ahora se ha reducido a la mitad. Esto ha provocado un descenso importante en el número de socios pasando «de 150 a 70 que somos ahora», señala David Ocaña.

Descenso de socios. Perder el 50 por ciento de los socios ha sido bastante complicado de llevar. «Empezar la temporada después de tantos meses, la salida de algunos socios por miedo y por todo lo que ha vivido todo el mundo, ha hecho que vivamos una temporada que defino como la más dura de la historia del CN Cuenca», reconoce el presidente, que además resalta el trabajo que se ha tenido que llevar a cabo a nivel administrativo para «conseguir los permisos para poder entrenar, hemos conseguido la autorización del concejal de Deportes que ha estado muy pendiente de nosotros y se lo agradecemos públicamente porque sin él hubiera sido imposible empezar».

Tras 27 años de vida y con esta situación, David Ocaña reconoce que vio peligrar la continuidad del CN Cuenca. «Tuvimos una asamblea en octubre de 2020 pensando que íbamos a empezar a entrenar, pero volvió el tema de las fases y los niveles y ese parón nos bloqueó muchísimo porque nuestra razón de ser es nadar y no podíamos, tuvimos que pedir paciencia a los socios y en esos momentos se generaron ciertas tensiones que a punto estuvieron de hacernos echar la llave».

Todos estos esfuerzos estaban encaminados a que los más jóvenes del club puedan seguir compitiendo. «La natación es un deporte joven, se empieza muy temprano, de hecho tenemos niños de tres años hasta jóvenes de 18, pero lo normal es que muy pronto dejen el club porque la natación es un deporte muy duro», explica Ocaña.

De cara a esta temporada, el club está pendiente de qué va a pasar con las competiciones. Así, la semana pasada fue el Regional de Invierno, al que solo pudieron ir tres nadadores del CN Cuenca, cuando «en condiciones normales hubieran ido entre 15 y 20». A esto hay que sumarle la incertidumbre de si pueden participar o no, de hecho los tres nadadores que compitieron en Albacete  hace dos fines de semana fueron avisados tres días antes. «Nos avisan según las bajas que va a habiendo».

Además de la sección de los más jóvenes de prebenjamín a absoluto, el CN Cuenca tiene la sección especial para nadadores con síndrome de Down, que el pasado fin de semana participó en el Campeonato de España logrando varias medallas.

Acaba de poner en marcha la sección máster, compuesta por nadadores que «vienen de los cursillos y que poco a poco se van iniciando en la competición» y se dedican sobre todo a aguas abiertas. Cabe destacar que el propio David Ocaña cruzó el Estrecho de Gibraltar. «Intentamos que si nuestros nadadores tienen una inquietud competitiva y quieren participar en cualquier cosa le damos las facilidades que podemos. Queremos tener nadadores para mucho tiempo y el único secreto es que les guste lo que hacen».

Ahora que los nubarrones se disipan y, aunque todavía seguimos inmersos en una pandemia, desde el CN Cuenca se ve el futuro con optimismo. «Si hemos superado el año más difícil de la historia del club, creo que la natación en Cuenca tiene mucho recorrido aún, un futuro prometedor, hay muchas ideas por hacer, ganas de trabajar y estoy seguro que el CN Cuenca va a tener una larga vida», concluye David Ocaña.