Ajos, puerros, habas, calabacín, tomate, judía verde, pepino, pimiento, repollo, berenjena y todo lo que pueda cultivarse y quepa en apenas 12 metros cuadrados de superficie. En las 36 parcelas de los Huertos Sociales que el Ayuntamiento proporciona, en este espacio del barrio de Villa Román, se trabaja sin descanso en estos días. Todo sea por recoger lo plantado dentro de unos meses y disfrutar de los ricos frutos que dé la huerta. No solo de tomates vive el hombre. Los adjudicatarios de estas parcelas pasan el tiempo, disfrutan del aire libre y se olvidan de los otros sinsabores que da la vida.  

Eso sí, acuden de forma ordenada, a distintas horas y en turnos planificados –se abre de ocho de la mañana a nueve de la noche–, en días alternos y según corresponda a los huertos pares e impares, para evitar aglomeraciones de gente. El propio espacio que hay entre parcela y parcela asegura ya que los usuarios no tengan contacto directo y, por tanto, eviten un posible contagio.

A pesar de que durante buena parte de los dos meses de confinamiento no se ha podido trabajar, las parcelas se muestran impecables. Todos han acelerado el trabajo para que la siembra se haga en tiempo y forma, y en semanas se recojan las sanas hortalizas. 

Sanas hortalizas en medio del asfalto - Foto: Reyes MartínezEl Ayuntamiento reabrió las puertas clausuradas de los huertos sociales en cuanto hubo posibilidad y la medida fue avalada por las autoridades sanitarias. «Cuando los adjudicatarios dejaron los huertos en marzo lo tenían todo preparado», cuenta el técnico de Medio Ambiente Félix Herráiz, que indica que «el tiempo ha acompañado, ha llovido y se ha mantenido lo que ya estaba plantado de invierno. Estos espacios dan mucho de sí y el que quiere entretenerse tiene para todos los días». 

La buena noticia no sólo es la reactivación de estos espacios ecológicos en el entorno urbano sino que, además, la Concejalía de Medio Ambiente y Sostenibilidad planea habilitar otros espacios de titularidad municipal para ampliar esta iniciativa y hacer llegar más parcelas a familias solicitantes, o a colectivos y asociaciones de diversa índole. Cabe recordar que Accem, Adace y el CEIP Isaac Albéniz ya disfrutan de áreas en los huertos sociales de la barriada. 

El concejal Vicente Martínez  confirma que, dado el interés que suscita cada año, la calidad de la presentación de cada parcela y el estado en el que se mantiene, «se está trabajando desde hace un año en la apertura y ubicación de más espacios. De las parcelas que son susceptibles de uso, se han estado viendo y valorando las intervenciones que hay que hacer y los costes». Las nuevas parcelas, avanza, podrían estar a disposición de los conquenses que lo solicitasen en la próxima campaña hortícola. Asimismo, subraya lo positivo de un proyecto, puesto en marcha hace ya 12 años, que dedica un uso ecológico y limpio al suelo donde se ubica, y reporta grandes beneficios para quienes lo cultivan. «Cada hortelano es muy cuidadoso y original a la hora de sacarle rendimiento al poco terreno que tiene», manifiesta el edil.