La Hermandad de San Juan Evangelista de Tarancón ya ha reducido en 500 kilos su paso de la Virgen de la Espanza y San Juan, tal y como se aprobó en la junta general extraordinaria celebrada a primeros de año. Sigue siendo igual la capacidad de los banzos, para más de 50 cofrades, y la estética general exterior de las andas, pero toda la estructura interior de hierro se ha puesto de aluminio, los ocho banzos eran de madera maciza y también se han cambiado a palos de aluminio y se ha modificado la iluminación, sustituyendo tres baterías de cincuenta kilos cada una por una batería de luz led y por cuatro halógenos, que se disimularán con dos rosas. Además, se han aligerado también las peanas que sustentan las dos imágenes.
«Si el paso con imágenes pesaba antes 1.200 kilos ahora pesará unos 700 kilos. Una personas que lo vea sin más no lo va a notar, porque por fuera ha quedado igual, pero para los banceros es muchísimo menos peso, porque aunque fuéramos todos era mucho el peso que cargaba cada uno», explica el presidente de la Hermandad de San Juan, Julián Gómez. Recuerda que «treinta kilos aproximadamente por persona era una barbaridad, lo que provocaba el desánimo del bancero, que acababa diciendo, el año que viene yo no vengo». En este sentido, hace un llamamiento a la participación y espera que este Viernes Santo el tiempo acompañe. El paso de la Virgen de la Esperanza y San Juan, que procesiona en la procesión del Santo Entierro, lleva desde la Semana Santa de 2010 sin salir a la calle debido a las inclemencias meteorológicas. «Hay muchas ganas», confirma Julián Gómez.
Orfebrería Orovio de la Torre, de Torralba de Calatrava (Ciudad Real), se ha encargado de la reducción de peso de estas andas, de metal plateado, que fueron realizadas en 1999 en Orfebrería Villarreal (Sevilla). Sus llamativos faroles se han mantenido igual, pero se ha incorporado a los candelabros un tubo con un líquido que proyecta luz natural de vela, pero no mancha ni hace humo, cada casquillo es sumamente ligero. El respiradero de las tulipas se ha reducido para intentar que la mecha se apague lo menos posible, aunque ya hay preparado una especie de mechero eléctrico en una barra de tres metros para que no sea necesario subir a las andas si las velas se apagan a mitad de una procesión.
Horquillas y almohadillas. Como novedad, para que los banceros puedan acompasar mejor el paso dadas las dimensiones de las andas, los tacos de madera de alrededor de 25 cetros de la hermandad se han sustituido por unas chapas para que suenen. «No hacen falta horquillas porque las andas llevan patas, pero creemos que así los banceros podrán llevar mejor el paso, pudimos comprobarlo cuando se utilizaron estas andas para la procesión extraordinaria de la Virgen de Riánsares del 25 de agosto, donde sí se utilizaron horquillas, de las hermandades de Jesús Nazareno y María Magdalena», detalla el presidente de la Hermandad de San Juan.
Tampoco antes se utilizaban almohadillas y esta Semana Santa los cofrades que lleven el paso estrenarán unas almohadillas que se adaptan a los banzos de aluminio en el momento. «Tenemos de dos medidas, así todas las personas llegarán al palo, unos necesitarán la almohadilla de una altura y otros la de dos, pero todos cargarán peso», comenta Julián Gómez. Otra novedad será que los dos pasos de la Hermandad de San Juan, las andas de la Esperanza y San Juan y las que portan la Oración en el Huerto y la imagen antigua de San Juan, llevarán desde este año llamador en vez de campana.