El Hospital Virgen de la Luz ha cerrado el año 2024 con 770 nacimientos, lo que supone un notable incremento del 18,8% respecto al año anterior, cuando se contabilizaron 648. Este crecimiento también mejora en un 8,3% los datos de 2022, año en el que se registraron 711 partos. Si se compara con 2021, cuando los alumbramientos no alcanzaban los 500, el salto es aún más significativo.
Este crecimiento progresivo en el número de nacimientos se interpreta desde el centro hospitalario como un reflejo de una tendencia demográfica y económica positiva de la provincia. «El año pasado fue fabuloso en cuanto a nacimientos, y lo valoramos como un síntoma claro de que Cuenca está ganando población joven». De hecho, «nosotros damos cobertura a toda la provincia, entendemos que la gente que está viniendo está en edad fértil», señala Begoña Fernández, directora de Continuidad Asistencial y Calidad de la Gerencia del Área Integrada (GAI) de Cuenca.
Fernández apunta que el incremento de nacimientos puede guardar relación con varios factores convergentes. Por un lado, Cuenca se ha convertido en una de las pocas provincias españolas que ha experimentado un aumento de población. «Observamos que está viniendo gente, probablemente atraída por la mejora del entorno económico, la apertura de nuevas empresas y el desarrollo de servicios como puede ser el nuevo hospital». En este sentido, señala que «Cuenca es una ciudad de servicios y el hospital actual es la empresa más grande que tenemos. Tener un hospital de las características del que vamos a abrir, creo que también influye».
Salto cualitativo. Uno de los hitos más esperados en la sanidad conquense es la apertura del nuevo hospital universitario, donde se trasladará el servicio de Obstetricia en la última fase del proceso, junto con el área de Urgencias y la hospitalización general. Las nuevas instalaciones supondrán una transformación profunda en la experiencia del parto. «Ganamos en espacios y en humanización. Las habitaciones tendrán luz natural, serán más acogedoras, y estarán diseñadas para que las mujeres puedan estar acompañadas por sus parejas y familias en un entorno confortable para todos», explica la responsable sanitaria.
Las zonas de espera también han sido replanteadas, ofreciendo ambientes agradables y funcionales tanto para pacientes y como para profesionales. Además, el quirófano obstétrico estará integrado en la planta, lo que permitirá realizar cesáreas sin necesidad de traslados.
La directora de la Gerencia del Área Integrada de Cuenca también destaca la implicación del personal sanitario en el proceso de mejora. «Hemos realizado visitas con los profesionales de estas áreas al nuevo espacio, y todos coinciden en que el cambio será para mejor. Están contentos y con muchas ganas de trasladarse», explica.
Begoña Fernández resalta, asimismo, el trabajo y el esfuerzo realizado por los profesionales implicados en los diferentes servicios cuya labor ha sido fundamental para llevar a buen puerto el incremento en el número de nacimientos en el centro hospitalario conquense.