La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha dedicará 10 millones de euros a la formación profesional y la inserción laboral en sectores clave para la región. Así ha explicado la consejera Portavoz del Ejecutivo regional, Esther Padilla, el acuerdo abordado en el Consejo de Gobierno del martes.
Dicho acuerdo tiene como objetivo mejorar la inserción laboral de personas desempleadas en sectores estratégicos para el desarrollo económico de Castilla-La Mancha, como el sector agroalimentario, el turismo, la investigación o las nuevas tecnologías, entre otros.
Padilla ha explicado que con esta medida pretenden llegar a cerca de 430 personas desempleadas que se integren en unos 40 proyectos desarrollados por empresas de la región. Las personas desempleadas de larga duración, así como los mayores de 52 años tendrán prioridad para el acceso a dicha formación.
Los proyectos tendrán una duración máxima de dos años y las entidades colaboradoras en el acuerdo deberán contratar al menos al 30 por ciento del alumnado que participe. La formación se realizará tanto en los centros educativos acreditados como en las empresas privadas que desarrollen su labor en la región, en ambos casos deberán registrarse como entidades formativas.
Esta ayuda recoge varios criterios subvencionables, como los costes de la formación, la tutorización en la empresa y la contratación. En el último de los casos puede llegar a suponer el 85 por ciento de la financiación del Salario Mínimo Interprofesional diario del empleado; además del pago de la Seguridad Social.
Otro de los incentivos que plantea el Gobierno de Castilla-La Mancha es para aquellos proyectos que se desarrollan en las zonas «prioritarias de estímulo económico», ha destacado Padilla. Así, se incrementaría hasta en un 20 por ciento la formación y contratación en empresas ubicadas en dichas zonas.