El calor 'seca' al textil

J.L.E.
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Las inusuales temperaturas de las últimas semanas golpean las ventas de la campaña de otoño e invierno mientras la hostelería celebra que la temporada de terrazas se prolongue durante más días

Sara Linuesa, propietaria de Plumetti Boutique, coloca una prenda coloca una prenda en su establecimiento - Foto: E. León

Las altas temperaturas pasan factura al sector textil de la capital, en especial al pequeño comercio. Es el último golpe a un sector que también nota la pérdida del poder adquisitivo de los clientes debido a la inflación. Sin embargo, en el lado opuesto, la hostelería celebra que las altas temperaturas en octubre sirvan para prolongar la campaña de verano y que los establecimientos llenen casi a diario sus terrazas. 

Son la dos caras de una misma moneda que afecta de manera muy distinta a dos importantes sectores de la economía conquense.

«La gente no cambia el armario porque no hace frío», explica Sara Linuesa, propietaria de dos tiendas en la calle Carretería, Plumetti Boutique y El Baúl de Sara, además de miembro de la junta directiva de la Asociación de Comercio. Linuesa indica que en los ocho años que lleva al frente del negocio «nunca había visto que el calor se alargara tanto», lo que dificulta las ventas de la ropa de la temporada de otoño e invierno. Además, llueve sobre mojado, porque «el verano vino tarde en julio, no habíamos apenas vendido y se juntó con la temporada de rebajas». Pero el calor no es el único problema que afecta al comercio local porque según Linuesa «la gente no compra en el comercio de Cuenca, prefiere irse a Valencia o Madrid porque no nos molestamos ni siquiera en mirar lo que tenemos». 

Lo cierto es que el frenazo al comercio textil afecta a toda España y según el barómetro mensual que elabora la patronal Acotex las ventas crecieron el pasado mes de septiembre tan solo un 1,2%.

En el lado opuesto, la hostelería celebra que el verano se prolongue más días, lo que les permite sacar mayor rendimento a las terrazas. Óscar San Juan, propietario del restaurante San Juan Plaza Mayor afirma que «nos ha venido muy bien porque nos ha regalado 30 días más». Además, este conocido hostelero del casco antiguo recuerda que el año pasado también hizo calor hasta el puente de Todos los Santos, «aunque no tanto». Por eso, celebra que pueda seguir la racha después de las «mejores vaquillas en 12 años» para su negocio.