La renta se ha esfumado por completo. El FS VivoCuenca, que sigue en lo más alto de la clasificación, cuenta ya con los mismos puntos que su inmediato perseguidor, el CD Sierra San Vicente. La derrota de la semana pasada de los chicos de Manolo Moya hace que la diferencia y el colchón de tres puntos con respecto al segundo clasificado se haya perdido cuando tan solo restan cinco jornadas para la conclusión del campeonato.
El técnico del equipo, Manolo Moya, asegura que «nos han entrado un poco los nervios» al ver cómo la distancia se ha visto reducida a la nada. Ahora mismo, ambos conjuntos tienen 56 puntos y la recta final del curso se presenta apasionante porque los dos quieren conseguir el ascenso de categoría.
Para alcanzar dicho objetivo, el entrenador destaca que «hay que sacar el oficio y ganar todos los partidos que faltan sea como sea» y subraya que es el momento «de sacar todo lo bueno que tenemos cada uno de nosotros». Y es que ahora sí que no hay margen de error. Cualquier tropiezo puede dejar a los conquenses con la miel en los labios.
Es importante ir paso a paso. Si bien es cierto que en las cinco jornadas que faltan para bajar el telón de la campaña existe un enfrentamiento directo en El Sargal entre el FS VivoCuenca y el CD Sierra San Vicente que «podría ser decisivo para ver qué equipo logra el ascenso». Este duelo llegará en la antepenúltima cita liguera, concretamente el 14 de mayo.
Encuentro. No obstante, el técnico conquense destaca que primero hay que pensar en el partido de este domingo (12 horas) en casa ante el Ciudad de Guadalajara, que es actualmente el cuarto clasificado. Moya afirma que «es un partido muy complicado pero hay que ganarlo sea como sea». Ya no solo por depender de sí mismos, sino también porque el segundo clasificado visita esta misma jornada la pista del Valdepeñas B, que se mantiene invicto en su casa. «Esperamos que nuestro máximo rival tropiece y eso nos ayude a tomar de nuevo distancia en la tabla», asegura.
La tensión es evidente en un equipo que ha visto cómo se ha perdido el colchón de puntos, pero también existe optimismo de cara al sprint final del campeonato. No hay duda que los conquenses remontarán el vuelo y se dejarán todo en la pista para lograr esa meta con la que tanto tiempo llevan soñando.