Con una energía terroríficamente divertida y acompañados por un rítmico compás, casi un centenar de jóvenes de Cuenca se lanzaron ayer a la calle para participar en un flashmob en la Plaza de España, con motivo del día de los muertos. Siniestro total lo cantaba y ellos ‘se lo bailaban’ sobre las tumbas.  

La noche de Halloween comenzó antes de lo previsto en la ciudad de Cuenca. Pasadas las cinco de la tarde, decenas de conquenses se reunían en la Plaza de España para celebrar un flashmob promovido por ¿Qué te Cuencas?, un programa de ocio en la calle organizado por el Ayuntamiento de Cuenca. 

Aunque la música comenzó a sonar cuando la luz del sol ya se había puesto, los primeros zombis comenzaron a deambular por este céntrico punto un poco antes para poder ‘reconvertirse’ en vivos muy muertos. Como si del programa Lluvia de Estrellas se tratara, más de cinco voluntarios pintaban a todos aquellos que quisieran y les caracterizaban con motivos terroríficos. Zombies, brujas verdes, vampiros, hombres lobo, momias, calabazas, esqueletos... La imaginación brotaba de las fuentes de la plaza y se materializaba en terroríficos seres.

Con la popular serie, The Walking Dead, de plena actualidad y seguida por más de uno de los participantes, la Plaza de España se reescribió en forma de escuela de baile y transcribió el título a un más que merecido, The Dancing Dead. Con muchas ganas más de bailar, a pesar de que los muertos vivientes deberían de tener sed de vísceras, estos improvisados zombis salieron de sus casas dispuestos a disfrutar y hacer reír a todos los espectadores, muchos de ellos sus propios familiares, que esperaban pacientes con sus cámaras y móviles para grabar estas divertidas reencarnaciones. Los padres, aliados inconfundibles en el caso de los más pequeños, incluso se animaron a bailar algunos pasos y a pintarse más de una cicatriz.

Al ritmo de la banda sonora de la oscarizada película de Tim Burton, Pesadilla antes de Navidad, se disfrutó de la noche de Halloween sin necesidad de ser ningún ‘zombi de madrugada’. Una valiosa enseñanza para los mayores y pequeños que disfrutaron de esta iniciativa del programa ¿Qué te Cuencas?.