La fiesta a trazos

Ester González
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De las manos de Luis Alberto del Burgo nacieron los excéntricos personajes que decoran numerosas pancartas y programas de fiestas que todavía hoy siguen divirtiendo a los taranconeros

Luis Alberto posa con algunas de sus creaciones, como la del año 1999 que escoge como su favorita - Foto: Ester González García

«De siete meses y medio y de nalgas». Así especifica Luis Alberto del Burgo cómo llegó al mundo hace 59 años. Taranconero de pura cepa, de los nacidos en el 'hospitalillo'. Fiestero y con gran sentido del humor, ha plasmado desde niño las 'sutilezas' y características taranconeras en cada uno de sus jocosos dibujos.
Luis Alberto empezó a explotar su creatividad cuando apenas era un niño. Su profesor fue Pedro Jiménez. «Le llamábamos Pejime, y con él di mis primeras clases en el antiguo palacio, lo que hoy en día es el Ayuntamiento», recuerda. Explorando el arte del dibujo desarrolló su propio estilo que él mismo define como «un dibujo humorístico, como un cómic; me gusta la exageración de las formas, la acentuación de los trazos, eso lo hace todo más divertido». 

A la temprana edad de 14 años empezó con una afición que le ocupa hasta día de hoy: dibujar los programas de fiestas. Cuenta que «antiguamente el libreto con la agenda para las fiestas te lo traían a casa, siempre me han gustado y empecé a diseñarlos para que me los publicaran». Tan solo unos años más tarde se fundaría la Peña 'El Mosto', las más antigua y con más historia de Tarancón. Este artista aficionado, cuya profesión nada tenía que ver con la pintura, fue uno de los primeros integrantes de esta emblemática peña. Comenzó así a crear dibujos e ilustraciones que servirían como recursos para esta agrupación. Cuadros, pegatinas, pancartas, carteles, un sinfín de formatos firmados por el peñista, llegando a acumular más de 40 programas y más de 30 pancartas con su sello tan distintivo.

El protagonista dice enfrentarse al dibujo más difícil, el que sale directamente de su imaginación: «Yo no copio, no necesito modelos, creo desde mi inventiva. Me enfrento a un papel en blanco y dejo fluir mis ideas». Para sus creaciones se inspiraba en elementos de Tarancón y sus vecinos como «la iglesia, las botas de vino, las indumentarias típicas...». Aunque sus dibujos comparten un estilo característico, todos tienen un mensaje diferente, pues «me gusta que tengan aire cómico, pero a la vez reivindicativo; suelo utilizar temas de actualidad, sucesos relevantes para la ciudad que hayan acontecido ese año». Describe una de sus obras favoritas, la que diseñó para el programa de 'El Mosto' del año 1999, que «son unos peñistas a los que no les ha sentado bien el vino».

Luis Alberto posa con algunas de sus creaciones, como la del año 1999 que escoge como su favoritaLuis Alberto posa con algunas de sus creaciones, como la del año 1999 que escoge como su favorita - Foto: Ester González García

No es nada fácil dibujar como solía hacerlo nuestro protagonista. Era ambidiestro, pero su mano buena para dibujar era la izquierda. Tal era su destreza que era capaz de escribir con las dos manos a la vez. Ahora esto ha cambiado. Luis Alberto superó una operación de corazón y varios derrames que le han obligado a cambiar de mano 'buena' para dibujar. A pesar de este bache, poco a poco está volviendo a retomar esta pasión y va recuperando sus trazos característicos. Este año, como no podía ser de otra manera, también ha sido el creador de la portada del programa de fiestas de su peña, «aunque este año he tenido algo de ayuda de mi hijo», admite el autor.

Luis Alberto posa con algunas de sus creaciones, como la del año 1999 que escoge como su favorita
Luis Alberto posa con algunas de sus creaciones, como la del año 1999 que escoge como su favorita - Foto: Ester González García

Sin perder el espíritu de fiesta, el taranconero ya se prepara para vivir las celebraciones de este año: «Lo que más me gusta es el galopeo, pero lo bonito es el conjunto, ser partícipe del ambiente festivo junto a tus vecinos. Las fiestas que no vivas hoy, no las podrás vivir mañana», concluye Luis Alberto.

ARCHIVADO EN: Arte, Tarancón