El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, aseveró ayer que el Gobierno de Castilla-La Mancha, liderado por Emiliano García-Page, está permitiendo que el Gobierno de España esté negociando una «financiación singular para Cataluña» que saldrá del bolsillo de los ciudadanos.
Este cupo catalán, tal y como ha descrito Núñez, podría suponer hasta 30.000 millones de euros «para el separatismo catalán». Una cuestión que considera injustificable, ya que hay ciudades de la región que no están recibiendo el apoyo económico de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
En declaraciones a los medios de comunicación en Puertollano, indicó que esa financiación especial que prepara Pedro Sánchez supondrán «recortes y retrasos» en proyectos «necesarios» para Castilla-La Mancha. Así, cuestionó que los ocho diputados castellanomanchegos del PSOE en el Congreso vayan a permitirlo, entre ellos el secretario de Organización del PSOE en la región: «¿Va a permitir el número dos de Page, Sergio Gutiérrez, que el dinero de nuestra tierra lo gestionen quienes quieren romper España?».
Por ello, el presidente del PP regional solicita a Page que «abandone el teatro político» y actúe con hechos, rechazando públicamente y con el voto en el Congreso cualquier acuerdo que favorezca al separatismo a costa de Castilla-La Mancha. «Esto no va de ideología, va de hechos concretos», concluye, ya que «o el dinero se queda aquí para nuestras inversiones o se va a Cataluña por los pactos de Sánchez con Illa y ERC, con la complicidad del PSOE de Castilla-La Mancha».