El squash es un juego de interior, de raqueta, una de las disciplinas más completas. Combina la rapidez mental para armar una estrategia, con el esfuerzo físico para ejecutarla. Es un deporte para todos, niños, jóvenes y adultos, que en Cuenca tiene «buena tirada». 

El Cuenca Squash Club es un equipo familiar que está creciendo con el paso de los años. A los mandos de Julián Niño, el presidente del club, niños y mayores disfrutan de un deporte que les apasiona y que disfrutan todos juntos, como una gran familia. Cuentan con una escuela de niños, uno de los proyectos «más importantes», como resalta Justo Fernández Tito.

Los más pequeños son la esperanza y la alegría del club. «Tenemos un gran porcentaje de niños, cada vez más. Hay algunos que llevan jugando unos cuantos años y la verdad que verlos en la pista es una pasada, son unos cracks. Sin duda, son un ejemplo a seguir», manifiesta la jugadora, Susana Muñoz. En ese sentido, Diego Serrano, uno de los jóvenes jugadores añade que «los niños juegan un rol bastante importante. Me apasiona verles jugar, ver como disfrutan, porque se toman el deporte de manera divertida y no competitiva. Le sacan buen provecho. No van tanto a competir y ganar, sino a participar».

Actualmente hay cerca de 30 niños y niñas en el club. Muchos de ellos, comparten deporte con sus padres, lo que es un «orgullo» para todos ellos. «Somos muchas madres y tenemos el orgullo y la suerte de tener a nuestros hijos dentro de las pistas, enseñándolos las cosas más importantes que son la nobleza y el compañerismo. Es fantástico poder compartir este deporte con ellos», destaca Susana. 

Desde muy pequeños cogen una raqueta y golpean a la pelota de goma. El squash es un deporte «fácil» de practicar que no requiere mucho tiempo. «Es muy sencillo. No necesitas tener un nivel muy grande para meterte en la pista y ponerte a jugar y eso, los chicos es lo que más le llama. Es darle a la pared con la bola y es sencillo. Tenemos niños muy pequeños de ocho años que juegan sus partidos y se lo pasan de miedo», recalca Fernández.

Es sencillo, divertido y engancha enseguida. «Es un deporte que a mi me entusiasma bastante, porque, a parte de que haces bastante ejercicio, yo me divierto mucho», manifiesta Serrano. Asimismo, Muñoz añade que «es muy completo, además te engancha muchísimo y te ofrece el lujo de expresarte en movimientos y sentir emociones únicas». 

Entrenan cada semana y acuden a las competiciones a disfrutar y a vivir el momento.  Hace unos días, se desplazaron 25 jugadores a Alcázar de San Juan a disputar la segunda jornada de liga regional y el papel de los conquenses fue de «sobresaliente». «La verdad que estuvo genial. Nos desplazamos un montón de compañeros y compañeras y fue un día fantástico. Además, nos acogieron fenomenal, en unas instalaciones espectaculares en las que me sentí muy cómoda», cuenta la jugadora de squash 57.

Diego fue campeón en la categoría Sub-15, además, sus compañeros Pablo Serrano y Darío Cifuentes, quedaron segundo y tercero respectivamente. Es por ello que Serrano hace una valoración «muy positiva». «Hace poco que empezamos a hacer desplazamientos y la verdad es que la experiencia me gustó mucho. Para ser de las primeras veces, estuvo bastante bien», destaca el joven. Dejaron huella y demostraron lo que son, un gran club.