La incursión en los últimos años en el mercado automovilístico del vehículo ecológico está cambiando gradualmente el consumo de carburantes en todo el país y, como es de esperar, la provincia de Cuenca no es una excepción.

Basta con echar un vistazo a los últimos datos de ventas de combustibles de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores) correspondientes al mes de junio para comprobar la consolidación del incremento del consumo de la gasolina en detrimento del gasóleo, si bien las diferencias entre ellos aún son abismales en favor de los vehículos diésel.

Y, de hecho, así lo pone de manifiesto el presidente de la Asociación de Empresarios de Estaciones de Servicio de Cuenca (Asemescu), Miguel Celdrán Nuño, quien confirma  que «el 90 por ciento de los clientes de estaciones de servicio siguen prefiriendo los vehículos de gasoil por comodidad, servicio, etc.».

- Foto: Elaboración propia

Aunque reconoce que se viene registrando un aumento progresivo de las ventas de gasolina, pone el acento en el hecho de que «en términos absolutos el volumen de ese tipo de carburante es mucho menor que el de los gasóleos». No en vano, según indica, todos los vehículos industriales y profesionales son diésel.

Lo que sí ha notado el sector conquense de las estaciones de servicio es el envejecimiento del parque de vehículos de gasoil. Y es que, tal y como apunta Celdrán, «las empresas que antes renovaban su flota cada dos o cuatro años, ahora, cuando llega el momento de cambiar sus vehículos, se encuentran con la circunstancia de que ya no se fabrica en diésel y optan por alargar la vida de sus furgonetas y camiones o, en algunos casos, los cambian por todoterreno pickup, también diésel».

Cifras de junio. El último informe de Cores refleja que el consumo de gasolina durante el mes de junio se elevó en la provincia a un total 2.749 toneladas, un  6,8 por ciento más que hace un año y un 24,6% más que hace cinco.

Las ventas de gasolina crecen un 24% en los últimos cinco años - Foto: Reyes Martínez

Todo lo contrario a lo que ocurre con las ventas de gasóleo, que en el sexto mes del año han ascendido hasta las 20.708 toneladas, 3.671 menos que hace un año, lo que equivale a una caída del 15%, y 2.518 menos que hace cinco, con un descenso del 10,8 por ciento.

Indicar que el 70,8 por ciento de las ventas diésel en el sexto mes del año, 14.662 toneladas, corresponden al de automoción (tipo A), mientras que el consumo de bonificado (tipo B) se eleva a 5.872 t, lo que representa el 28,3% del total, y el de calefacción (tipo C) a 174t, el 0,8 por ciento restante. 

Primer semestre. Evolución que prácticamente se repite al analizar el consumo acumulado de carburantes en el primer semestre del año en la provincia. En concreto, en estos seis meses el consumo de gasolina alcanzó las 14.502 toneladas, 1.072 más que hace un año, cuando se quedó en las 12.980, lo que representa una subida del 8,3 por ciento.

Incremento que es mayor aún si se analiza el último lustro, puesto que de enero a junio de 2019 las ventas de los dos tipos de gasolina (95 y 98) se redujeron hasta las 11.346 toneladas, 2.706 menos que en la actualidad, por lo que el actual consumo es un 23,8 por ciento más alto que hace cinco años.

Fenómeno totalmente contrario se produce con el consumo de los tres tipos de gasóleos (A, B y C). Y es que en los seis primeros meses del presente ejercicio se han vendido en las estaciones de servicio conquenses un total de 132.922 t de este carburante, 13.460 menos que hace justamente un año, cuando se estimaron en 146.382 t, un 9,2% más que en la primera mitad de este 2023.

Descenso que aumenta si se amplía el periodo de comparación. Y es que en el primer semestre de 2019, hace cinco años, el consumo de gasóleo ascendió a 149.051 t, 16.129 más que en el mismo periodo del presente ejercicio; es decir, en cinco años las ventas de este tipo de combustible han disminuido un 10,8%. 

En definitiva, la conversión paulatina del parque automovilístico  hacia lo ecológico está cambiando el panorama de los carburantes fósiles, a pesar de que el número de vehículos no para de crecer, que en el último lustro se ha cifrado en el 4,7%.