A Castilla-La Mancha no le ha ido mal en la vía judicial para dar la batalla del agua. Ya son seis las sentencias del Supremo que obligan al Plan del Tajo a incorporar los caudales ecológicos y la última además recalca que su aplicación debe ser inmediata y no escalonada, como pretende el Ministerio. Quizá por eso el presidente de la Junta baraja volver a recurrir a los tribunales para obligar a que se ejecuten estas sentencias ganadas. 

Lo que ocurre es que las nuevas reglas del trasvase para cumplir esos caudales ecológicos llevan año y medio de retraso. Lo último que se supo fue a raíz de un borrador que trascendió y que no se ha llegado ni siquiera a publicar para información pública, aunque se trata de una propuesta para los volúmenes y umbrales aplicables para este 2025. Page no lo entiende.

"Me están avergonzando mucho los incompresibles retrasos de la Administración del Estado para aprobar nuevas reglas de explotación del Tajo-Segura", lamentó, "ni siquiera se han trasladado a públicas, se han filtrado". Por eso amenaza con tomar las cartas en el asunto si en el Ministerio de Transición Ecológica no cumple con las sentencias y aumenta los caudales ecológicos. "Nos vamos a tener que plantear incluso acciones judiciales para la ejecución de sentencias, cosa que no queremos bajo ningún concepto", apuntó.

Page también se refirió al trámite abierto para concesión de volúmenes por 20 hectómetros cúbicos de la desaladora de Torrevieja para zonas regables del Tajo-Segura. "Celebro que se esté dando luz verde a la ampliación de la desalación en Levante", comentó, "es el paso que hay que dar, pues nadie quiere que le falte el agua a nadie". Page ha hecho estas apreciaciones durante su intervención en la firma de los estatutos de la Interprofesional de Vinos de Valdepeñas.