Castilla-La Mancha ha cumpliendo el objetivo de déficit del 1,1 por ciento de 2022, aunque para llegar a esa cifra hay que tener en cuenta que se elimina el incremento salarial del 1,5 por ciento y los ajustes de contabilidad de determinados fondos.

Tal y como informó ayer el Ministerio de Hacienda, el déficit oficial de Castilla-La Mancha relativo al ejercicio 2022 se sitúa en 893 millones de euros, el 1,9 por ciento del PIB.

El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, aclara que esta cifra está afectada negativamente por el cambio en los criterios de contabilización de determinados fondos operados en 2021. El mantenimiento de esos mismos criterios de contabilidad en 2022 explica una parte del déficit de este año, en concreto, 313 millones.

Ruiz Molina incidió en que la cifra publicada por el Ministerio incluye el gasto, no previsto en el presupuesto inicial por el incremento adicional del 1,5 por ciento en las retribuciones del personal empleado público, lo que supuso un mayor gasto, de 73 millones. 

Eliminando estos dos factores anteriores, la cifra de déficit en la que ha incurrido en Castilla-La Mancha asciende a 507 millones de euros, el 1,1 por ciento del PIB regional.