«Podemos aportar muchas cosas a la sociedad»

José Luis Enríquez
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El presidente de la Asociación Provincial de Pensionistas y Jubilados rechaza los tópicos que rodean a las personas mayores y se plantea como gran objetivo reducir la brecha digital

Justo Mora en la sede de la UDP - Foto: E. León

La jubilación brinda una oportunidad para demostrar que hay mucha vida por delante y que se puede acabar con los estereotipos que rodean al colectivo de las personas mayores. Bajo esas premisas hay personas que predican con el ejemplo. Es el caso de Justo Mora (Cuenca, 1956) que acaba de tomar las riendas como presidente de la Asociación Provincial de Pensionistas y Jubilados (UDP). Mora reniega de los tópicos que rodean a las personas mayores, defiende que los pensionistas pueden aportar mucho a la sociedad y tiene entre ceja y ceja un objetivo: reducir la brecha digital.

¿Qué significa para usted ser el presidente de la UDP de Cuenca?

Es un motivo de orgullo porque estoy ratificado por las 135 asociaciones que tenemos en la provincia. Hasta ahora he estado desempeñando el cargo de vicepresidente. La verdad es que hemos recorrido ya la provincia durante varios años y me han ido conociendo, y como le digo me produce una gran ilusión y una satisfacción. La labor que hemos hecho hasta ahora ha sido reconocida por las asociaciones y son ellas las que me han votado y ratificado en el puesto de la presidencia.

¿Qué retos se plantea en una provincia tan dispersa y con el problema de la despoblación?

Hay muchísimos porque la despoblación y el envejecimiento de la población en la provincia son muy notables. Tenemos dos grandes retos. Uno es que en el verano cuando la gente que vive en ciudades como Madrid, Albacete o Valencia , y otras  zonas, se concentra y es cuando más actividades se realizan. Y el otro reto, es en el resto del año. Es un reto muy importante para nosotros porque tenemos que dar vida a los pueblos y a los habitantes, que son los que mantienen la población. Estamos en contacto con los ayuntamientos y tratamos de que todos los pequeños núcleos de este sector o colectivo estén activos. Recorremos toda la provincia y con las nuevas tecnologías se está avanzando bastante bien.

Hablando de nuevas tecnologías un hito de la UDP es la puesta en marcha del Teléfono de la Soledad del Mayor. ¿Ha supuesto un antes y un después?

La verdad es que sí. Ya teníamos un teléfono pero que era exclusivamente de voz. Con la pandemia nos llamaba mucha gente, no sólo de Cuenca, sino del resto de Castilla-La Mancha, pidiéndonos con quién podían hablar. Somos un equipo muy pequeño pero en aquel momento vimos que había que dar un paso más, lo investigamos y después de un acuerdo con la Diputación y un tema tecnológico de crear la página web www.udpcuenca.com y unas tablets, que entregamos para que se comuniquen las asociaciones con nosotros, pensamos que había que dar un paso más con las nuevas tecnologías y con el uso de la imagen. Así surgió una centralita virtual. Cualquier usuario que lo necesite nos puede llamar, abrimos una ficha, estudiamos su caso y tecnológicamente vemos la forma de ponerlo en marcha. Ha sido un proyecto que ha estado financiado por el Ayuntamiento de Cuenca, con el apoyo de los Servicios Sociales, que pusimos en marcha hace un año y la verdad es que estamos muy satisfechos. Pero queremos darle más cobertura a la provincia.

¿Nuevas tecnologías y pensionistas convergen bien? ¿Se supera entre el colectivo el miedo a conectarse?

Lo dice bien. Es miedo por la falta de familiarización con las tecnologías y con herramientas que ellos no han trabajado nunca. Pero es verdad que la pandemia nos obligó a resolver las comunicaciones, por ejemplo por el uso del whatsApp o las videoconferencias. Hay un porcentaje minoritario que son los que se van incorporando y al resto nos cuesta quitarles esa parte de miedo. Hemos creado 23 delegaciones para estar más cercanos en la provincia de Cuenca porque la dispersión que hay en extensión de terreno es tan enorme que no le vamos a hacer trasladarse al usuario a Cuenca. Ya estamos teniendo videoreuniones y está costando, pero con nuestra ayuda los usuarios van perdiendo esa parte de miedo.

¿Cree que el denominado 'talento senior' se aprovecha en el mundo laboral o se prescinde de él con demasiada facilidad?

Se prescinde mucho, pero hay capacidad más que suficiente para participar y no tener que estar relegados a un puesto pasivo. Todo lo contrario. Somos muy activos. Lo que pasa es que pasamos con la jubilación a otro término laboral, nada más. Hay mucha gente que tiene mucha actividad y capacidad para crear cosas nuevas y para apoyar mucho a la sociedad.

¿Los mayores tienen margen para contribuir más aún a la sociedad?

Muchísimo. Lo que ocurre es que ha habido un antes y un después con la pandemia. Hay una brecha importante entre lo que es la gente de menos edad más joven, porque en un 90% todo es tecnológico, y lo que es nuestro colectivo, que desconocen las tecnologías. Eso no significa que no podamos aportar, siempre con ayuda, claro. De hecho, ayudan los hijos, la familia o alguna personas cercana. Esa parte de brecha es la que estamos tratando de reducir o minimizar.

¿Un jubilado puede compatibilizar un trabajo remunerado con una pensión?

Perfectamente. Hay gente que todavía tiene mucha capacidad y que, además, estaría dispuesta. Una vez que te jubilas, si no tienes nada que hacer, la vida te cambia de manera radical. Nosotros, sobre todo, tocamos el mundo rural y ahí siempre hay algo que hacer, con lo cual eso les permite estar activos. Para los que vivimos en las ciudades, que hemos trabajado en un mundo laboral comercial o industrial, es un cambio radical. Es pasar de levantarte a las siete de la mañana todos los días para ejercer tu función a no tener que hacerlo.

¿Hay que entender la jubilación como una oportunidad más?

Es una oportunidad más para hacer otra cosa que quizá es diferente, para realizar esos proyectos que se tienen y que no se habían puesto en marcha porque la vida te ha ido derivando a otras cosas

Ahora se habla mucho de edadismo. ¿Hay muchos prejuicios asociados a la edad?

La verdad es que estamos sufriéndolo mucho. Hay una brecha, hay un antes y un después que se nota. Por ejemplo, estamos dando conferencias en la universidad para que los trabajadores sociales tomen el pulso de nuestro colectivo y que no nos tengan por esos viejos que se van a Benidorm en un época determinada. Queremos cambiar ese estereotipo, que somos personas que podemos realizar actividades como gente más joven y podemos aportar mucho. El edadismo lo que hace es clasificarlos de una manera, pero nosotros tenemos que luchar para decir que estamos aquí y que podemos aportar muchas cosas. 

Estamos a las puertas de una campaña electoral. ¿Se debería tener muy en cuenta a las personas mayores a los jubilados en los programas electorales?

Por supuesto, estamos luchándolo mucho, sobre todo desde la estatal. Y le pediría a los ayuntamientos que hubiese una concejalía en la que se estuviese pendiente de las personas mayores porque somos un grupo muy importante. Nunca hemos querido ser una carga para la sociedad, todo lo contrario. Cuando vinieron las crisis, las familias han aguantado con las pensiones de los jubilados. Somos un colectivo más, pero nos tienen que dar la voz que merecemos.                                                                                                                                                                                                                                                                  ¿La pensión media es la adecuada?

No estamos muy de acuerdo. La media, aunque digan que sea de 1.100 euros, no es real. Hay muchas mujeres que son viudas, con una pensión de 500 euros o que ni llega. Hay unas no contributivas que están del orden de los 480 euros. Hoy en día, tal y como está la situación es imposible. Se tendrían que equiparar un poco más.Si ahora hay una subida del ocho por ciento, que es considerable, no sube igual el ocho por ciento de 400 euros que de 2.700 euros.

¿El sistema de pensiones está asegurado?

No están aseguradas, para nada. Estamos luchando para eso porque en el Pacto de Toledo había una base importante de unos fondos, que no sabemos porqué se perdió. Habría que hacer una caja importante porque nosotros, quizá con nuestra edad no tenemos ese problema. Pero las generaciones que vienen detrás lo van a tener más complicado.

Acaba de tomar posesión de su cargo. ¿Con qué logro se conformaría dentro de cuatro años?

La tecnología. Me gustaría que no nos quedemos desplazados con cosas como las citas médicas, las consultas, la banca... que ahora on line se tiene que hacer prácticamente de todo. Incluso con la administración, que no permite que se hagan presencialmente muchas gestiones. Lo que quiero es que seamos autónomos. Se están incorporando jubilados mas actualizados, pero falta un poco de compromiso porque nos ven un poco como 'la excursión de los viejos' sin pensar que ahora no somos tan viejos ya que ahora una persona de 70 años no es lo mismo que una de 70 años de hace 20 años.