Ruegos de lluvia

Manu Reina
-

Las hermandades de San Isidro de Arriba y Abajo viven con «mucha devoción» la festividad en honor a su patrón e imploran para que llegue el agua y ponga fin a la preocupante sequía

Ruegos de lluvia - Foto: Manu Reina

Devoción, agradecimientos y especialmente ruegos fueron las notas predominantes entre los conquenses que participaron en la festividad de San Isidro. Este año, como viene siendo habitual, los hermanos imploraron para que de una vez por todas lleguen las lluvias que acaben con la sequía y con la complicada situación que atraviesan los agricultores y ganaderos.

De esta forma, la Hermandad de San Isidro de Arriba y también la de Abajo vivieron con pasión y una petición unánime las actividades programadas para rendir culto al patrón del campo. Ambas hermandades procesionaron por sus calles, acompañados de cientos de personas y personalidades.

La Hermandad de San Isidro de Abajo partió por la mañana desde la ermita con su tradicional procesión y recorrió las inmediaciones de la Ronda Oeste con las imágenes en hombros de San Isidro y su santa esposa María de la Cabeza. En el desfile procesional se procedió a la bendición de campos para después regresar al punto de partida. Por la tarde fue el turno de la Hermandad de San Isidro de Arriba, que celebró también su procesión. En este caso desde la ermita por el camino de San Isidro y recorrió el paraje de la Hoz del Júcar con cientos de fieles y hermanos. De igual forma se realizó la tradicional bendición de campos, concretamente a la altura del mirador de la Cruz de la Era. Tanto en una como en otra la petición unánime era el regreso inmediato del agua para minimizar las pérdidas y recuperar la tan necesaria actividad en el sector agrario. En ambas hermandades se han llevado a cabo distintos actos y actividades durante el fin de semana y han sido unos días muy intensos. Estos encuentros en honor a San Isidro concluirán hoy con la misa en recuerdo de las almas de los hermanos difuntos. 

Novedades. El presidente de la Hermandad de San Isidro de Arriba, Florián Belinchón, destaca que estos días en honor la patrón de los agricultores y ganadores se han vivido con «mucha pasión y emoción». Además, Belinchón subraya que se ha hecho hincapié «en las peticiones para que llueva cuanto antes»con tal de que el sector primario pueda salir a flote. 

La hermandad de arriba cuenta este año con varias novedades. La primera de ellas se debe a que su coro goza de una imagen renovada tras llevarse a cabo distintas actuaciones artísticas. De hecho, el friso posee ocho dibujos «que hacen alegoría a cosas del siglo XIV y XV» y en el centro «hay un panel doble con la imagen del arado de San Isidro», explica Belinchón. Además, la hermandad cuenta también con una cerámica «muy bonita» donada por Tomás Bux.