El Rebi Cuenca afronta mañana (18,30 horas) el partido «más importante de nuestra historia», tal y como destaca el técnico, Lidio Jiménez. Y es que el equipo tiene la posibilidad de asegurarse, como mínimo, la tercera posición de la clasificación si es capaz de sumar los dos puntos. Es un puesto que nunca antes ha conseguido y podría lograrlo si supera en El Sargal al Cangas de Morrazo. 

Los conquenses, que se sitúan en segunda posición a tan solo dos jornadas del final del campeonato, esperan cuajar el mejor partido para lograr este nuevo hito. Está claro que el Rebi Cuenca se cita de nuevo con la historia. «Espero que los jugadores sepan de la importancia que tiene este partido», subraya Jiménez. Además, si el conjunto conquense consigue ganar podrá depender de sí mismo en la última jornada para acabar como subcampeón liguero, que es un logro todavía más increíble.

El Rebi Cuenca recibirá mañana a un adversario gallego que pugna por no descender de categoría. El entrenador local avisa que el rival «está metiendo muchos goles y tiene mucha variedad en ataque» por lo que la clave para vencer es «defender bien y hacer buenos repliegues», explica. «Tenemos que estar cómodos en defensa», añade. Si el equipo logra hacer todo ello tendrá muchas más opciones de ganar. 

No hay duda de que la plantilla saldrá a la pista concienciada de la necesidad de ganar. De hecho, los jugadores saben que «depende de este partido para lograr grandes cosas». Es una auténtica final y así se debe afrontar. Lidio Jiménez subraya que sus pupilos «han entrenado muy bien durante toda la semana» y están hambrientos de volver a la senda de la victoria tras la derrota de la pasada jornada en la cancha del Bidasoa Irún.

Afición. Los aficionados no faltarán a la cita y serán un pilar fundamental para que el Rebi Cuenca consigue finalmente hacer de nuevo historia. El entrenador alaba a la afición y se muestra tranquilo porque «sé que no nos van a dejar solos y van a venir a apoyarnos como siempre» porque, entre otras cosas «la gente sabe de la importancia del partido». 

Y es que la afición es incondicional. De hecho hay convocada una gran quedada en la parte de atrás de El Sargal dos horas antes del inicio del encuentro para comenzar a animar esta final. El feudo conquense va a ser una auténtica olla a presión con el objetivo de llevar al equipo en volandas.