El ferial se engalana

Manu Reina
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Los feriantes ultiman sus atracciones, casetas y puntos de venta de comida y bebida a pocas horas del inicio de las fiestas patronales, que tendrán su punto neurálgico en el Recinto Ferial

El ferial se engalana - Foto: Manu Reina

El Recinto Ferial encara la recta final de su puesta a punto para albergar el punto neurálgico de la Feria y Fiestas de San Julián, que comenzarán de forma oficial mañana y se prolongará hasta el domingo 4 de septiembre. En estas horas previas al pistoletazo de salida, los feriantes ultiman sus atracciones, casetas y puestos con tal de que el ferial presente una imagen envidiable. Y es que por delante se vienen unos intensos días de alegría, diversión y jolgorio, que tanto gusta a conquenses y visitantes de la ciudad. 

Los propietarios de estos imprescindibles atractivos llegaron a la capital hace días, algunos con más antelación que otros, dependiendo de la dificultad y complejidad de montaje de sus propios puestos. Javier Benito, que llegó a la ciudad el domingo procedente de Valencia, explica que levantar su caseta de tiro de corcho «supone un día entero de trabajo para que esté todo correctamente» y detalla que «los objetos, peluches y accesorias van llegando poco a poco en camiones». En este caso, Benito tiene unas expectativas «positivas para las fiestas si se repiten como se celebran cada año». 

Santos Moreno, que tiene una atracción de coches de choques, subraya que necesita «tres días para montar». En esas jornadas de montaje influye el calor, que puede retrasar la labor. No obstante, Moreno, que lleva viniendo a las fiestas de San Julián desde 2007 desde Zaragoza, reconoce que «aprovechamos las horas de noche porque la temperatura es mejor». Igual que en el caso de Javier, Santos tiene una gran expectación para los próximos días. 

También es laborioso montar una caseta de lanzamiento de dardos, puesto que conlleva colgar «muchísimos peluches hasta rellenar todos los espacios», explica Carla Soria, que llegó a Cuenca hace unos días desde Valencia. Esta joven, que trabaja en este puesto familiar, explica que «lleva mucho trabajo montar y desmontar pero es algo a lo que estamos acostumbrados». Una vez más se repiten las mismas sensaciones positivas. Carla recalca que «Cuenca siempre es una ciudad muy buena para venir a sus fiestas». 

Los feriantes son una parte esencial para celebrar la Feria y Fiestas de San Julián. Y es que sería inconcebible celebrar estos días en honor al patrón sin ellos. Ya queda menos para su inicio y el Recinto Ferial está prácticamente engalanado para recibir a miles de personas cada día. 

Atracciones. La visita al recinto ferial también será un reto con la adrenalina y la emoción porque muchas de las atracciones de feria ofrecen experiencias increíbles que sólo duran unos minutos. Giros increíbles, velocidades extremas o sacudidas inesperadas es lo que ofrecen algunas atracciones como el Súper Kanguro, el Barco Vikingo o subirse a la Nube de La Cárcel. Además, este año habrá dos novedades: el Booster Monster y el Castillo del terror.  Sin embargo, no todo son emociones al límite porque las atracciones están pensadas para el disfrute de todas las edades.  Un ejemplo es el Tren de la Bruja, la Noria Infantil, la Pista Multijuegos, las camas elásticas o los Caballitos Locos. Son algunas de las atracciones que este año también animarán el recinto ferial y donde las animadas tómbolas y bingos ofrecerán su abanico de regalos.  

Eso sí, las atracciones no son las únicas con protagonismo en el recinto ferial porque también habrá una amplia oferta de casetas de alimentos y bebidas. Así, en el punto neurálgico de la diversión conquense no faltarán las patatas asadas, hamburguesas, perritos calientes, almendras garrapiñadas, chuches, algodón dulce o churros, entre otras delicatessen.