Fuentelespino de Moya: Patria natal de Marco Pérez, trovador del cincel e imaginero selecto

Miguel Romero
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Si Aben Gomar recordara, en este lugar hubo buenas torres de la Orden de Santiago, tierras de "pan llevar" y ahora hay, buenas gentes honradas

Fuentelespino de Moya: Patria natal de Marco Pérez, trovador del cincel e imaginero selecto - Foto: fuentelespinodemoya.net

Cuando llego a la calle Real y me paro en la de las Tres Marías, me encuentro a Vicente Pérez de la Sierra y a José Benedicto Sacristán hablando, plácidamente, de nuestro recordado Luis Marco Pérez. Les escucho y veo el entusiasmo que les guía en la descripción de la triste vida de este escultor, nacido aquí, afamado en sus excelentes trabajos y no lo suficientemente reconocido por los círculos artísticos e institucionales. Miro la torre de la iglesia, inmensa, altiva, elegante, sobrecogedora sobre el caserío al que oculta bajo su bendición. Es piramidal en su final y entre su acogimiento, la talla del Nazareno impregna de misterio religioso todo el interior de un templo sencillo en traza y ornamentación. Estas tierras son antiguas y así lo ponen de manifiesto los yacimientos de la comarca. Que nace como lugar de repoblación no hay la más mínima duda, que surge a los pies de una fuente donde un espino le define, también, pues claro es su topónimo y que como aldea pasa a depender del alfoz de la gran Moya, también pues como tierra de su Marquesado aparecerá a lo largo de siglos. Y es que, por aquí, el moro anduvo y mucho. Cerca del caserío la Torre de Ben Gomar o Abengomar, cubo cuadrado sin elevación, es testigo de escaramuzas entre los moros de Moya y los de Albarracín, tal vez, viendo llegar a las tropas del Arzobispo Jiménez de Rada cuando por aquí quiso conquistar para su mitra y además, entre su término, los restos de cerámica en baños cromáticos de cobalto, atestiguando tiempos históricos de antaño. En el término, muchos parajes y entre ellos, la torre de don Alonso, situada a poca distancia de El Cubillejo y el Cubo de la Vereda, cerca de hontanares y manantiales de agua, territorios que serían de la Orden de Santiago, una vez que sus torres o predios abastecían el Hospital de la misma, ahí al lado, en el lugar de Moya, amojonadas en tiempos de Alfonso X y luego en las revueltas comuneras del XVII. Este, sin duda, es un bonito lugar. Quizás ahora su caserío esté necesitado de arreglos, adecentamiento y limpieza, pero su solera la mantiene, sus gentes son hospitalarias y cuando pateas sus calles, como la de la Fuente que te lleva al abrevadero y lavadero donde la tradición sigue recordando tiempos austeros, te encuentras de sopetón con la placa que acredita el lugar de nacimiento del gran escultor Marco Pérez. Entre la plaza y la carretera muy poco espacio y con la cruz que en el interior te marca la devoción casi te despides, no sin antes entrar en su iglesia dedicada a Nuestra Señora de los Ángeles, con su trazado plenamente neoclásico, planta de cruz latina y cúpula sobre crucero. Portada de medio punto entre pilastras que cuando llegas apenas te das cuenta porque la torre se lleva todas las miradas. Dicen que las ermitas de San Roque y San Sebastián tendían romería en tiempos, ahora, poco o nada queda. Cierro los ojos y veo desfilar los numerosos pasos que hiciera en su taller madrileño, el gran Marco Pérez. Aprendió eso del arte de esculpir e imaginar madera en Valencia, en esa afamada Escuela de San Carlos para luego compartir con sus maestros Ortuella y Macho, habilidades y buena traza, la mejor. Entre la carretera y la calle de la Fuente, desfilan el Jesús Amarrado a la columna, el Jesús Nazareno del Salvador, la Soledad del Puente, San Juan Evangelista y la Virgen de las Angustias; mientras, por la calle de los Egidos, San Juan Bautista, San Pedro Apóstol, El Descendimiento, el Medinaceli, el Ecce Homo, la Exaltación, Jesús entrando en Jerusalén, el Prendimiento….todo es un clamor, belleza compungida en sus maravillas tallas. Marco, desde el campanario, contempla y llora, se siente solo, no encuentra sosiego entre sus gentes…Recordémosle.