Un duelo intenso y muy complicado

Manu Reina
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El Rebi Cuenca recibe mañana al Anaitasuna con el propósito de volver a la senda del triunfo y olvidar cuanto antes el traspié de la jornada pasada en tierras riojanas

El pivote Diego Vera intenta lanzar a portería pese al fuerte agarrón que sufre de un adversario. - Foto: J.A. Lillo

El Rebi Balonmano Cuenca recibe mañana al Anaitasuna (20 horas) con muchas ganas de resarcirse de la dolorosa derrota en Logroño. El equipo es consciente de que la mejor respuesta es volver a la senda del triunfo cuanto antes y mucho más cuando el duelo se disputa en El Sargal. «Hay que sacar los puntos de casa y si lo hacemos nos levantaremos, que el equipo está capacitado para ello», destaca el técnico, Lidio Jiménez.

El cuadro conquense sigue tercero y tiene un margen de dos puntos sobre el cuarto clasificado. «Nos hemos ganado estar en la tercera plaza». Para no perder la distancia es importante que el equipo saque adelante, como mínimo, todos los encuentros en casa. Para batir al cuadro navarro habrá «que pelear mucho». Entre otras cosas porque se trata de un adversario que «es intensidad, puesto que defiende y ataca rápidamente y de forma intensa», destaca el entrenador. «Nunca se descuelgan de los partidos y nos va a exigir un desgaste físico descomunal», apunta. Los conquenses intentará respaldarse de nuevo en su afición. 

Lidio Jiménez valora la salida de Ante Grbavac y le deseó «mucha suerte» en su aventura en Croacia, que es donde jugará el próximo curso. Además, el técnico ensalza la llegada de Miguel Espinha, que es un jugador al que conoce muy bien. «Estoy muy contento de que pueda venir», recalca. El meta portugués llegará en verano para suplir a Ante, que «está haciendo un gran trabajo», recalca el técnico.