El proceso de estabilización sigue preocupando a los vecinos y trabajadores del Ayuntamiento. La concejala de Empleo, Lorena Cantarero, explica los puntos claves y las fases que se están siguiendo para «abordar y superar este asunto de la mejor manera posible tanto para nosotros como para nuestros trabajadores».
Esta misma semana, se publicaba en el BOE la segunda remesa de plazas del proceso de estabilización. Esto hizo saltar la alarma del comité de trabajadores, que echó en falta un aviso previo por parte del Ayuntamiento. Según explica la concejala, «ni nosotros mismos sabemos con exactitud la fecha en la que el BOE hará público el anuncio de las plazas, nosotros lo mandamos y ellos deciden cuándo lo publican..., pueden tardar un día o una semana». Sin embargo, defiende Cantarero que «nosotros previamente hemos informado desde el primer momento a todos los trabajadores de la dinámica del proceso, los trabajadores a los que les repercutía fueron notificados y estamos más que dispuestos a responder a cualquier duda que pueda surgir».
En el caso de Tarancón son 152 plazas en total las que se someterán a este proceso que tiene como plazo hasta el 31 de diciembre de este mismo año. «Seguramente lo terminaremos antes para no pillarnos los dedos y dejarnos tiempo por si a caso», apunta la concejala. En la primera de las tandas se publicaron 24 plazas y en esta última 26. «Hemos empezado por las de las categorías más altas para agilizar todo», señala Cantarero.
Los primeros estabilizados fueron «los más complejos», su convocatoria salió en noviembre y se formalizará en abril. Según detalla la concejala, esto es «debido a la dificultad para formar un tribunal». Ahora que estos primeros estabilizados formarán parte del tribunal para la selección de las próximas plazas, «el proceso irá mucho más rápido», tanto es así que según adelanta Cantarero, «nuestra intención es que irán saliendo el resto de plazas cada 15 días más o menos».
Además de las dificultades de la selección del tribunal, el Ayuntamiento se enfrenta a otras complicaciones. La concejala defiende que «no podemos solucionarlo todo con un protocolo general ya que nos estamos enfocando en cada trabajador y en su situación particular». Esta decisión tiene su parte negativa y es que «vamos más despacio», pero por otro lado, «nos aseguramos de que cada empleado tenga las mejores condiciones», defiende la edil de empleo.
Para todo este proceso se acaba de incorporar a las filas del Consistorio una auxiliar administrativa para ayudar en trámites como abrir expediente y organizar documentación, con la intención de dinamizar y disminuir el volumen de trabajo. La concejala argumenta que «nuestro único interés es que los trabajadores mantengan sus puestos, pero con una plaza fija como dicta la ley».