El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi continúa su "lenta pero progresiva mejoría" en el hospital San Raffaele de Milán (norte), donde está ingresado desde el pasado 5 de abril por una pulmonía y una leucemia mielomonocítica.
"El cuadro clínico del presidente Silvio Berlusconi aparece en lenta pero progresiva mejoría", indica el último y escueto boletín médico, emitido hoy por el hospital y firmado por los doctores Alberto Zangrillo y Fabio Ciceri, responsables de Reanimación y Hematología, respectivamente.
Los dos especialistas explican que "continúa el tratamiento y el control de la función de los órganos" de Berlusconi, de 86 años y que el pasado domingo pudo abandonar los Cuidados Intensivos, tras doce días, y ser trasladado a planta.
La mejoría del líder de Forza Italia (FI) le permitió telefonear ayer a su "número dos", el ministro de Exteriores y vicepresidente del Gobierno, Antonio Tajani: "Estaba a punto de entrar en el Vaticano y recibí una llamada de Berlusconi, le oí con voz fuerte".
"Le dije que estamos organizando un gran mitin de FI en Milán el 5 de mayo y espero que ese sea el momento en que se le pueda ver o escuchar. Está mejorando, tiene muchas ganas de volver, pero es bueno que se cuide", anunció Tajani en una entrevista televisiva.
El líder conservador lleva 17 días ingresado en el San Rafaelle debido a una pulmonía y una leucemia mielomonocítica que le fue diagnosticada "hace tiempo" y por la que ha recibido quimioterapia.
El exmandatario recibe cada día las visitas de alguno de sus cinco hijos y de su hermano Paolo que se han mostrado optimistas sobre la recuperación de "Il Cavaliere", y está siempre acompañado por su pareja, la diputada Marta Fascina, 53 años más joven.
Desde el hospital, Berlusconi también llamó en los primeros días a los dirigentes de su partido y a sus aliados en el Gobierno: la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y el vicepresidente Matteo Salvini.
Con éste volvió a hablar el pasado miércoles, cuando conversaron sobre el pase a semifinales de la Liga de Campeones del AC Milan, el equipo de Salvini y del que Berlusconi fue presidente y dueño hasta 2017.
Berlusconi, que ha sufrido numerosas hospitalizaciones y operaciones a lo lago de su vida y en particular en los últimos años, ya había sido ingresado en el San Raffaele a finales de marzo para lo que se describió como "controles médicos".