Con más goles que fútbol, pero con la gran actuación de Leo Messi en el segundo tiempo, el Barcelona cerró ayer su clasificación como primero de grupo tras derrotar al PSV Eindhoven (1-2) con lo que disputará la vuelta de octavos de final de la competición en el Camp Nou.
El Barça ganó después de tres partidos sin hacerlo (Inter, Betis y Atlético de Madrid), pero su juego no convenció. Con muchos errores en el pase, el PSV dispuso de unas cuantas ocasiones para batir a Ter Stegen, pero solo De Jong logró descontar con un gran remate de cabeza en el minuto 85.
Al cuadro culé le costó mucho entrar en materia y el conjunto local tuvo el control de la situación en el primer tiempo, período en el que remató hasta tres veces a los palos azulgranas.