La temporada alcanza la recta final en Tercera División de fútbol sala y eso supone que «comienza la cuenta atrás» para el FS VivoCuenca, tal y como subraya su técnico, Manolo Moya. Ahora mismo restan seis jornadas para la conclusión del campeonato y el cuadro conquense quiere mantener la primera posición en la tabla para lograr así el ascenso de categoría.
Moya destaca que su equipo «está muy bien físicamente y también emocionalmente» tras una semana de descanso. Ensalza además a sus jugadores porque «tienen un compromiso impecable y ya se están ejercitando para el siguiente partido». Todos ellos han podido recargar las pilas y desconectar durante unos días, aunque no pueden relajarse porque el próximo encuentro liguero llegará el domingo a domicilio (12,30) ante el Infantes FS, que es noveno en la clasificación.
Es un duelo donde los conquenses tendrá que estar «muy concentrados y efectivos» en el juego si quieren regresar a casa con los tres puntos. El encuentro no será nada fácil porque, como se ha podido comprobar en las últimas jornadas, los rivales están mejorando sus registros frente al cuadro conquense. «Está claro que todos quieren ganarnos al ser el líder», apunta el entrenador.
Ganar. De esta forma, el FS VivoCuenca tratará de volver a la senda del triunfo después del empate en casa ante el EFS Socuéllamos (6-6) justo antes de marcharse al parón de Semana Santa. Los chicos no pudieron superar a su adversario pese a que gozaron de numerosas ocasiones. Por suerte, el inmediato perseguidor en la tabla y único rival en la lucha por el ascenso, el CD Sierra San Vicente, también empató en su correspondiente partido. Por lo tanto, la distancia de tres puntos entre ambos se mantiene intacta. «Es un colchón que tenemos que defender con uñas y dientes», recalca Moya.
Hasta el final de la campaña, el FS VivoCuenca tendrá que aguantar sea como sea si quiere cantar el alirón. Aún queda pendiente también un duelo directo ante el CD Sierra San Vicente en la capital conquense por lo que aún no hay nada decidido.
En esta recta final no podrá estar el lesionado Cerzi, que sigue trabajando en su recuperación. Además, el guardameta Mario Gómez se perderá los dos próximos partidos por lesión. No obstante, el FS VivoCuenca tiene mimbres suficientes para reponerse a estos contratiempos y afrontar con creces las seis finales que restan por delante.