La llegada del extremo David Balaguer al Ciudad Encantada pone la guinda al atrayente proyecto de Lidio Jiménez y Rafa López. Con tan solo 22 años, el barcelonés es una de las perlas nacionales más prometedoras. Así lo demostró en el filial blaugrana y en el primer equipo, donde marcó 60 goles en 18 partidos pese a contar con pocos minutos en la pista.

 

Su explosividad y capacidad goleadora enamoraron al Toulouse francés el pasado mes de febrero, aunque Balaguer acabó el curso en el conjunto culé a la espera de recibir una oferta interesante. La entidad que preside Isidoro Gómez Cavero apostó fuerte por el jugador catalán, que decidió seguir los consejos de Oliva y Mendoza e incorporarse a la disciplina de los conquenses. «Tanto Jorge como David me convencieron. Tengo muy buena relación con ambos desde que estamos en la selección española de balonmano playa. Los dos me hablaron maravillas del grupo. Tenía claro que necesitaba jugar más minutos para seguir creciendo porque aún soy muy joven y tengo que mejorar. La verdad es que dejar el Barça es difícil, pero doy un gran paso en Cuenca», argumenta el nuevo refuerzo del Ciudad Encantada.

 

La gran temporada de los castellano-manchegos no ha pasado desapercibida para David, cuya ilusión es máxima: «El equipo siempre da la cara pese a sus problemas económicos. Es algo que admiro mucho y que realza la labor del bloque».

 

Una de las virtudes que mejor definen a Balaguer es su velocidad, que le permite ser letal a la contra. «Me encanta jugar rápido, lanzar fuerte y defender duro. Es lo que he aprendido en la escuela del Barcelona desde que llegué a la entidad hace ya una década», desvela.

 

El extremo catalán se muestra ambicioso y avala el proyecto de los conquenses: «No pienso sólo en la permanencia porque hay un gran grupo. La competición decidirá, finalmente, en qué puesto merecemos estar».

 

Guiño a la afición. La afición de El Sargal será, como indica el exjugador del Barça, fundamental para plantarle cara a todos los rivales: «Ya he tenido la oportunidad de jugar en este pabellón y sé que el público siempre responde. Con su apoyo incondicional podremos superarnos».

 

En esta línea, Balaguer agradece la confianza del club y lanza un mensaje a la hinchada: «Los aficionados van a poder disfrutar de un gran espectáculo en la pista».