La afición del Conquense manifiesta su gran entusiasmo e ilusión al ver cómo está trabajando su equipo durante este verano para confeccionar el próximo proyecto deportivo. No es para menos porque el club ha renovado a gran parte de la plantilla del pasado curso con nombres cotizados en el Grupo XVIII de Tercera División y eso es seguro de garantía. Al menos desde el punto de partida. Y es que el conjunto dirigido por Rober Gutiérrez no solo está fortaleciendo la defensa y la medular, sino que está sumando mucha pólvora en ataque, que era una de las cuentas pendientes y mayor hándicap durante la anterior temporada.
Una de las razones de la ilusión de la afición es que continúan en la disciplina conquense jugadores que dieron la talla el año pasado. Parera, Jesusete, Coba, Sergio Rodríguez, Raúl Bernabéu, Yuya, José Vega y los hermanos Iván y Héctor Rubio rubricaron su continuidad. También genera optimismo ver que tanto Marco Recuenco como Luca Lohr cumplirán su segundo año de contrato.
Sí es cierto que el aficionado podría echar de menos a algunos de los jugadores que defendieron la camiseta hasta hace unos meses, como son Miguel Fuentes, Airam Fernández, Elián Guillén, Tomás Cruz, Álvaro Chumilla, Iñaki Quereda, Jesús Beas, Etxebe, Youssef o Mario Ordóñez. Muchos de ellos tuvieron un papel destacado en el puzzle de Rober Gutiérrez.
Sin embargo, el Conquense ha trabajado sin prisa pero sin pausa para firmar jugadores contrastados. Hasta siete fichajes se han confirmado hasta la fecha y cada uno de ellos motiva a la masa social blanquinegra. Antonio Fernández y Jairo Cárcaba son los dos refuerzos de mayor peso y que están llamados a tirar del carro, pero también destacan Pablo Olivares, Javi Heranz, Fran Perujo, Marcos Recuenco y César Susmel, quienes defenderán el escudo con uñas y dientes.
Rober Gutiérrez explicó a La Tribuna que la plantilla está confeccionado casi al cien por cien, con tan solo unos pequeños detalles que resolver para darla por cerrada. Y es que aún se esperan algunos movimientos y anuncios, tanto de renovaciones como de incorporaciones. Una de las incógnitas es ver qué pasará finalmente con el lesionado Fran Oller, que ha sido uno de los más destacados en estos años, aunque la grave lesión que sufrió en el sprint final de la campaña pasada hace que todavía no se sepa nada de su continuidad, aunque todo hace indicar que finalmente así será.
Gran trabajo. El Conquense es uno de los equipos que mejor y más rápido ha movido fichas en este mercado estival, lo que le ha permitido firmar jugador con un gran rendimiento en otros clubes. Este trabajo le ha permitido llegar a mediados de julio con un plantel serio y llamado a estar en la parte alta de la tabla, con el firme objetivo de pelear por ubicarse entre los mejores. Para conseguir ese reto, que busca con ahínco la afición, los jugadores volverán a los entrenamientos el 26 de julio, que es la fecha elegida por el cuerpo técnico para dar inicio a la pretemporada.
También ha habido movimientos tanto en el banquillo como en la parcela directiva del Conquense. El cambio más significativo se produjo en el cargo de director deportivo. Alberto Asensi asume las riendas en lugar de Borja Martínez. Por otra parte, el cuerpo técnico es el mismo con la única modificación de la llegada de Mario Cartagena como segundo entrenador para ocupar la vacante que dejó Daniel Castellanos.
Con todo ello, el Conquense tiene prácticamente definidas todas sus piezas del puzzle para afrontar una ilusionante campaña 2023-2024 en la que se pretende dar un salto y presentar sus credenciales como un club llamado a pelear por entrar, como mínimo, a los play off de ascenso. En ese complicado y competitivo camino estará siempre el aficionado, que no se separa nunca de su equipo y del que espera muchas alegrías en este curso, que arrancará muy pronto.