Hay personas que sin una mano que les ayude tienen imposible encontrar un trabajo. El dinero de Bruselas que llega con el Fondo Social Europeo+ está para eso. Esta mañana la consejera de Economía, Empresas y Empleo, departió con trece entidades a las que cofinancia ese 15 por ciento de aportación que exige la UE(no todas las comunidades autónomas lo hacen) y así consiguen captar más fondos para proyectos en la región de empleabilidad dirigidos a colectivos vulnerables.
«Nuestros usuarios llegan a nuestros centros 'inempleables', sin posibilidad de trabajar y nuestro objetivo es que consigan unas competencias para saltar al mercado de trabajo en las mismas condiciones que los demás», explica Eugenio Parlorio, de Proyecto Hombre Castilla-La Mancha, que se centra en las personas con problemas de adicciones.
En la Fundación Secretariado Gitano esperan para este ciclo llegar a 12.000 personas como mínimo. «No es cuestión solo de crear cauces con las empresas», apunta su director, Carlos Ruiz Martín, «sino minimizar la discriminación, problemas del lenguaje, culturales que han podido ser factores que les han llevado a la exclusión».
En Cruz Roja, por ejemplo, trabajan con mujeres que se han visto apartadas del mercado laboral, jóvenes o mayores de 45 años. Jesús Rodríguez apunta que quieren trabajar con 6.000 personas al año y lograr un contrato para unas 2.500. Desde la Fundación ONCE para este período calculan llegar a 17.000 personas con discapacidad y conseguir un empleo para 5.000, tal y como indica Carlos Hermida.