Cinco son los barrios que dan vida a la ciudad de Tarancón. Uno de ellos es el barrio de San Roque y cada año, a mediados de agosto es un volcán de celebración entre los vecinos. Días de tradición y de unión entre los taranconeros y allegados de otros municipios.  Esta festividad se convierte además en el preludio de las fiestas patronales.

Este año, la encargada de inaugurar las fiestas de este año fue la pregonera Alba Fadrique de los Ríos. Ella pasó gran parte de su niñez en el barrio y además muchos de sus antepasados fueron también San Roqueros. Su discurso estaba repleto de recuerdos y descripciones de cómo era la vida en el barrio y de cómo en esencia se mantiene. Fadrique y su pregón fueron la primera chispa del estallido que esta celebración supuso para el barrio.  Tras sus palabras cabe destacar las palabras del presidente del barrio Máximo López-Reina hizo una serie de distinciones a diferentes colectivos por su contribución al barrio: a los Padres Franciscanos, a la congregación Mercedaria que se cumplen 100 años de su llegada a Tarancón y a los familiares de María La Pijota.

Aunque así comenzaban las fiestas oficialmente, desde el siete de agosto se comenzaron a celebrar el novenario que fue oficiado por el sacerdote Carlos Herraiz Ayllón Vicario de la Parroquia de San Víctor y Santa Corona, y párroco de Santa Cruz de la Zarza y Belinchón. Según cuenta el Presidente de la cofradía de San Roque, «la multitudinaria participación en los actos previos nos hacían augurar unas fiestas muy animadas».

Una emocionada María García recibió el nombramiento de Infanta de San Roque para las festividades de este año 2023 - Foto: Cofradía San Roque

La novedad. Este año y aprovechando las reformas que hicieron previamente dentro de la ermita, la cofradía quiso tener un detalle con todos aquellos que había formado parte de San Roque de una u otra manera, así pues se creó unos grabados con todos los nombres de los 21 pregoneros que habían pasado por allí. También cuenta como novedad el presidente de San Roque que este año se le encargaron a un pintor, vecino de la ciudad y del barrio de toda la vida, Felipe Garrido, una carpeta con cuatro laminas representando distintos escenarios de Tarancón como la fachada de la parroquia o una arboleda característica de la zona. Con esta carpeta y las cuatro ilustraciones que contiene el barrio pretende recaudar fondos para sus arcas de las que luego se servirán para este tipo de celebraciones.

Continuaron los actos y actividades como la tradicional limonada, la verbena o los fuegos artificiales, pero el propio Máximo destaca como momento especial el vivido con la apodada 'infanta del barrio', según explica el Presidente, hace  años vivía en San Roque una mujer a la que apodaban Reinilla y de ahí salió la tradición de nombrar a una infanta todos los años. Esta sería la vigésimo cuarta vez que lo hacen y la afortunada fue María García quien recibió los honores muy emocionada.

En cuanto al balance final, Máximo argumenta que «el barrio y los vecinos se han volcado con las celebraciones». Comparando con otros años destaca que «todos los actos, incluso los religiosos han sido muy bien acogidos, las misas y las novenas estaban prácticamente llenas todos los días». El presidente dice estar «contento y más que satisfecho» con la respuesta por parte de los taranconeros y se enorgullece declarando que «esta unión es lo que representa a un barrio, se trata de disfrutar y compartir».