Los peluqueros de Cuenca también quieren menos IVA tras perder un 15%

Pedro Ig. Tauroni
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La Asociación de estilistas y centros de belleza conquense tiene 40 asociados

Las peluquerías de mujeres son las más afectadas por la crisis - Foto: Reyes Martínez

Los peluqueros de Cuenca perdieron entre un 15 y un 20 por ciento de su facturación en 2013. Germán Martínez, presidente de la Asociación de peluqueros de Cuenca, que pertenece a su vez a la Federación española de empresarios de peluquería, comentó a La Tribuna que el sector «está muy mal».

Como forma de mostrar su disconformidad con la situación, representantes del gremio se manifestaron hace unos días en diferentes ciudades de España para expresar al Gobierno su disgusto. Martínez explicó que entre las principales peticiones que hicieron están la reducción de la presión fiscal del ocho al 21 por ciento y llevar a cabo una lucha «más efectiva» contra el intrusismo laboral.

Martínez comentó que un ejemplo de que el negocio flojea es que en los últimos años se ha reducido el número de asociados, de tal manera que «algunos no pueden hacer frente a los pagos de las cuotas». Actualmente la agrupación conquense está compuesta por 40 asociados.

El presidente de los peluqueros de Cuenca expresó que «la presión fiscal es inaguantable, por lo que está acabando con muchos negocios». No supo precisar si desde el inicio de la crisis la subida del IVA ha implicado el cierre de locales, aunque sí aseguró  que «los negocios están mermando».

Explicó que «todo empezó» cuando se subió el IVA, con lo que «tuvimos que subir los precios o asumir los costes». Así, consideró que «en nuestro sector nos hemos empobrecido y hemos tenido que despedir o, en el peor de los casos, cierras». Precisamente por eso, reivindicó la vuelta a un IVAreducido al ser «un servicio de primera necesidad».

Observó que «algunas veces, cuando termina el mes y ves que lo que has ganado de caja es para pagar a los empleados y para pagar los impuestos, me pregunto qué hago aquí». Indicó que cuando llega a esta punto hay que «echar a un empleado», por lo que «se entra en una rueda». Al haber uno menos, en la peluquería se puede atender a menos personas, por lo que los ingresos no aumentan.

Intrusismo laboral. Otro tema que el presidente de los peluqueros conquenses también destacó como importante fue el de la lucha contra el intrusismo laboral. Reconoció que el sector al que pertenece es muy «vulnerable en el tema de la economía sumergida», ya que «cualquiera con un peine, unas tijeras, un secador y un cepillo monta rápido una peluquería».

Aunque tanto las peluquerías de hombres como de mujeres han visto bajar su facturación, son las de ellas las que más se han visto afectadas. Explicó Martínez que esto es así porque el coste de un tratamiento suele ser más caro, puesto que los hombres generalmente «sólo se cortan el pelo». «Suele ser raro que se hagan mechas, moldeados u otros tratamientos», señaló. Así, «debido a la crisis, las personas recortan gastos, por lo que las mujeres van menos a la peluquería». Esto provoca que las dueñas de los locales facturen menos y, a la larga, se vean obligadas a despedir a alguna de sus trabajadoras. Puso como ejemplo la reducción de las cenas de Navidad, lo que provocó que «las mujeres, si no van a cenar, no van a peinarse».

Para concluir Martínez aseguró que en Cuenca no se realizó ningún acto de protesta, tal y como se hizo en 23 ciudades españolas, debido a que «no nos enteramos con tiempo suficiente».